Immortals

24. Recuerdo

-Miyavi-

En aquel gran jardín, cubierto por pasto fresco, en el centro de aquel jardín, estaba él sentado mirando a las mariposas revolotear.

Sonreí amplio al verlo. Era un pequeño y tierno ángel. Kai era el único niño especial que yo conocía.

Kai poseía la maravillosa habilidad de hacerme sentir amado con solo mirarme, Kai, la criatura más perfecta para mi.

¿Qué podía hacer yo? Un arconte de 17 milenios enamorado de su pequeño pupilo de 6 milenios. Por donde lo observara era un pecado. Uno muy grande.

Yo no podía detener el amor que tenia hacia Kai. Yo lo amaba incluso sin saber lo que es el amor.

-Kai -salí de mi escondite y él alzo su rostro para mirarme fijamente para después regalarme una hermosa sonrisa remarcando su único hoyuelo.

-Miyavi -su voz tan infantil me hizo sonreír y sonrojarme. Corrió hacia a mi levantando sus brazos para que lo alzara.

Lo alce y di un par de vueltas con él en mis brazos. Él comenzó a reír y yo hice lo mismo.

-Pensé que no vendrías -sonrió abrazandome.

-¿Estas loco? -acaricie su cabello castaño -no me perdería la oportunidad de estar contigo en tu cumpleaños, además... tenia que darte tú regalo.