Prólogo: La última noche.

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Nina's POV.

La competencia había finalizado y ya tenía a su equipo ganador: ¡el de mis amigas! Todos las aplaudían y les gritaban cosas alentadoras, en especial a Yam que había sido la protagonista (Esta vez, la pasada y todas las anteriores) pero al parecer era algo que a ninguna de las chicas le molestaba. Me di vuelta y vi como su perfecto novio Ramiro se metía en la pista para saludarla, todos estaban prestando atención a ellos: La pareja perfecta del Jam and Roller y del Blake South College. Rodeé mis ojos y me acerqué al resto de mis amigas, ellas también habían dado todo y merecían las felicitaciones. 

-¡Chicas! -Llamé la atención de tres de mis amigas: Luna, Ámbar y Delfina.- ¡Felicidades campeonas! -Grité eufórica y las cuatro nos unimos en un abrazo. 

-Todavía no puedo creer lo bien que salió. -Habló Luna colocando sus manos en su cabeza, a lo que todas reímos por su expresión. 

-¿Estaban festejando sin mi? -Dijo Yam en un tono sarcástico, acercándose a nosotras. 

-Eso nunca, y lo sabes. -Dijo Ámbar con una sonrisa mientras la abrazaba. 

-Bueno, ¡felicidades! Estoy contenta de que hayamos ganado. -Dijo Yam mientras las miraba a todas.- Sólo una cosa, Ámbar te dije que dejaras de comer un poco. El vestido se te ve un poco... raro. -Agregó mirándola de arriba a abajo, generando un silencio entre nosotras. 

Y bueno, a pesar de todo ellas son mis amigas. Estamos las cinco juntas desde que tenemos tres años y aunque sucedan escenas de este tipo son las únicas personas que han estado tanto en mis momentos felices como en mis momentos tristes. Ellas cuatro son las únicas que patinan del grupo, para ser sincera mis intereses son otros y aunque a Yamila le costó aceptar que yo no participaría en sus competencias de patinaje, lo terminó aceptando. 

Ámbar's POV. 

Habían pasado varias horas de que la competencia había terminado, estábamos en el granero de la casa de Nina escuchando el álbum de Fifth Harmony y bailando por todos lados. Si soy sincera estos momentos no los cambio absolutamente por nada, estas cuatro chicas son todo en mi vida y si no fuera por ellas, nadie me hablaría ni en la escuela ni en el Roller. 

-Creo que es hora de que hagamos cosas más de chicas maduras, ¿no? -Dijo Yam mientras bajaba el volumen de la música. 

-¿A qué te referís? -Le preguntó Nina levantando una ceja, la única capaz de contradecirla.

-No puedo creer que nos juntemos sólo a escuchar música. -Movió su pelo hacia atrás mientras nos miraba a todas.- ¿No les parece ridículo? -Preguntó al notar que ninguna respondía. 

-A mi me parece divertido. -Esta vez habló Luna, levantando sus hombros. 

-Pienso igual que Luna, además hace cinco minutos estabas saltando con nosotras. -Exclamó Nina levantando sus brazos, sin entenderla.- ¿Cuál es tu punto, Yamila? 

-Traje algo... -Nos dijo con una sonrisa en el rostro mientras buscaba algo en su bolso.- ¿Se animan? - Preguntó mostrándonos una botella de un litro de Vodka. 

-¿De donde sacaste eso? -Habló Delfi, algo sorprendida. 

-Eso no importa. -Le respondió algo enojada mientras buscaba unos vasos.- Ya tenemos 15 años chicas, nadie se fijara en nosotras si seguimos comportándonos como unas niñitas. -Continuó hablando mientras llenaba cinco vasos de Vodka

-Yo acepto. -Respondí después de un rato.

-Sabía que no me ibas a fallar, Ámbar. -Me dijo dándome el primer vaso.- Y no te preocupes que no engorda. -Me guineo el ojo y agarró otro vaso, para dárselo a Luna. 

«Liars»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora