{36} Se cancela su condena.

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Delfi's POV.

Habían murmuros por todo el juzgado,  nadie entendía absolutamente nada. Las cuatro miramos hacia los chicos y vimos la misma expresión en sus caras, completo shock. En ese momento, el juez golpeó el martillo generando el silencio absoluto en el lugar. Miró a Tamara y le hizo una seña para que siguiera hablando.

-Fui amenazada para hacerlo.- Continuó explicando y comenzó a llorar.- Nunca pude saber el nombre detrás de la persona que me obligó, fue todo anónimo y muy bien armado. Pero me amenazaba con un secreto mío que yo no podía dejar que saliera a la luz.- Finalizó mientras secaba sus lagrimas, en ese momento notamos que Nina también estaba llorando.  

-Parece que A se llevaba mal con todo el mundo.- Susurró Ámbar y noté que Luna la codeó suavemente indicándole que no era el momento para tal comentario. 

-¿El secreto era algo relacionado con usted, señorita Simonetti?- Preguntó un jurado del estrado.

-Sí, conmigo y con la muerte de Milena, la chica que confundieron su cuerpo con el de Yamila.- Continuó hablando y ahí recordamos lo que Nina nos había contado, la cual lloraba cada vez más.

-No puedo creer que siempre la odié y tengo la culpa de todo esto que le está pasando.- Susurró Nina y le tomé la mano intentando calmarla, rogando porque ningún policía nos viera. 

-¿Tiene alguna otra prueba para aportar?- Preguntó el juez y Tamara se acercó a entregarle unos papeles. Según parecía, eran los mensajes que había intercambiado con Mariano después de la noche de la iglesia. 

El juez pidió otro descanso jurídico para deliberar cual sería su solución, nosotras seguíamos detenidas así que no podíamos movernos ni acercarnos a nuestros familiares. Nina estaba con su mirada perdida en algún punto mientras que Luna acariciaba su pelo, Ámbar y yo simplemente mirábamos la escena sin saber que hacer. 

-Hemos llegado a un acuerdo.- Habló el juez y todos volvieron a mirar hacia adelante.- Delfina Alzamendi, Luna Valente, Ámbar Smith y Nina Simonetti quedan en libertad, se cancela su condena.- Finalizó para luego golpear su martillo, nos miramos emocionadas y a continuación todas nos giramos a buscar miradas de nuestros familiares. En seguida me encontré con la de Pedro el cual me sonrió emocionado.

-Tamara Simonetti queda arrestada por asesinato de primer grado.- Y ahí se nos fue toda la felicidad que teníamos en ese momento. No servía que saliéramos si iba a entrar Tamara por nosotras. Me sentí culpable yo, no quiero imaginar lo que sentía Nina. 

En cuanto me quitaron las esposas salí corriendo para abrazar a mis padres los cuales lloraban, mientras mi mamá me susurraba en el oído comentarios como "yo sabía que mi chiquita no había hecho nada" y más cosas así. Después de unos minutos me giré para encontrarme con la mirada de Pedro, el cual vino a abrazarme con la mayor de sus fuerzas y me hizo sentir completa, que estaba a salvo.

-Creo que no iba a resistir un día más contigo ahí adentro.-Me susurró al oído y sonreí, para luego besar sus labios que tanto había extrañado, sin importarme que mi mamá y mi papá estuvieran al lado mirando. 

Ámbar's POV.

Después de haber estado unos diez minutos abrazada a mi mamá mientras las dos llorabamos, me pidió disculpas sintiéndose más que culpable pero se volvió a trabajar. A mi no me faltaba nada pero eso era porque mi mamá se la pasaba todo el día trabajando y sé que eso la hacía sentir culpable en parte, pero yo la entendía y le agradecía todo lo que hacía por mi. En ese momento, noté que Simón se estaba acercando a mi y volví a sonreír.

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