Gerard.
La única vez que me han dado una paliza, fue a los siete años, cuando luché con una chica por un cono de helado; frambuesa, mi favorito, pero desgraciadamente era el último. La chica me ganó, claramente. Aún recuerdo a mi mamá negociando los daños con los padres de esa niña y ella como si nada hubiera sucedido jugando en los columpios con sus amigos.
Finalmente, mi madre perdió. Sus padres negaron a pagar mi ida al hospital para curar mis heridas, porque yo era el chico y yo debí haberle faltado al respeto a la niña, eso dijeron. No había testigos de lo ocurrido y todo se fue al caño, yo me quedé sin helado y con cinco puntadas en la barbilla.
Solo que hoy es distinto, hoy no llamé por ayuda, hoy no llamé a mamá. Cuando me di cuenta de que volví a ser consciente, mis heridas ya estaban curadas, pero me advirtieron que mis ojos me harían lucir como mapache por las siguientes semanas. Me preguntaron un teléfono por el cual me auxiliarían ayuda, pero no di ninguno.
El simple hecho de pensar en mi mamá recibiendo la noticia de que me dieron una paliza, la harían venir a armar la tercera guerra mundial a la preparatoria y la verdad, eso me parece sumamente vergonzoso, aunque claro está que yo no tengo la culpa de no ser un ser violento y atroz como ese tal Iero, y de seguro ahora sus amigos de soccer junto con mi hermano, le están aplaudiendo y felicitando por lo que me hizo.
Me cruzo de brazos y me da un escalofrío.
Josh, hermano mío, no tenía idea de que detestabas tanto.
- Escuché que te metiste en una pelea – abren la puerta y veo a Hazel cruzar al cuarto de enfermería. Vaya, qué vergüenza, no lo puedo creer. Me he paralizado. – y dime ¿cómo te sientes?
Avergonzado.
Impotente.
Adolorido.
Molesto.
La chica más bonita que he visto hasta ahora vino a verme, dentro de todo lo malo viene lo bueno. Ahora, Gerard, no actúes como idiota y di algo muy lindo que impresione a Hazel.
- No tan mal, el otro chico quedó peor – miento. Claro que miento, ni siquiera lo toqué ¿cómo se me ocurre decir esto? El chico no tiene ni un rasguño provocado por mí y si ella se da cuenta me dirá mentiroso y todo lo perderé, soy un tonto.
- ¿en verdad? – pregunta con cierto brillo en los ojos, no puedo echarme para atrás - ¿y dónde está?
- ¿Qué? No entiendo tu pregunta ¿dónde está? – trago saliva y me duele.
- Sí, el otro chico. Si quedó tan mal, debería estar aquí contigo ¿no? – rayos, rayos, rayos, te digo que es mentira, tienes que decirle la verdad – no importa, solo quiero decirte algo, Gerard.
- ¿ah... si? – entonces callo.
- Iba a rechazar tu oferta de salir contigo este viernes, iba a inventarte una excusa para cancelar, pero... veo que no eres lo que yo creí, eres más que eso Gerard, eso me inspira, así que saldré contigo ¿pasas por mí a las seis el viernes?
¿¡Alto qué!? ¿quiere salir conmigo por supuestamente darle una paliza a ese chico? No sé cómo reaccionar ante eso, no sé si debo alegrarme porque saldré con ella o no porque sé que es mentira o también porque me acaba de decir que solo me haría caso si fuera un chico rudo. Esto es tan confuso.
Algo bueno tiene que salir, no te quejes.
- ¿mañana? – pregunto.
- Ah, sí – sonríe – mañana es viernes. Genial, te veo – me guiña el ojo y me siento realizado – eres un chico fuerte, Gerard.
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Destruyendo a Gerard. [Frerard] DONE
FanfictionA Frank le molesta todo el mundo, a Gerard le encanta estar bien con todo el mundo. Frank le tira un libro en la cabeza y se conocen. Frank no es tan malo, Gerard lo sabe. Frank lo odia, Gerard lo ama. Frank lo ama. Gerard lo odia. Gerard quiere co...