La Recompensa del Dolor

Capítulo Uno: Eleanor Wolf

Muarice Wolf es el virrey del estado del Klows, su hija Eleanor es la mujer más hermosa del lugar, cada hombre al verla se ve cautivado por su gran belleza. Al ser la hija de un noble, su padre espera que se case con alguien que provenga de una familia de clase alta, no permitiría lo contrario. Es muy común que en casos como este, los matrimonios ya estén arreglados, de esa manera se aseguran de aumentar el estatus y la herencia familiar.

Eleanor por su parte, desde que cumplió 12 años de edad, para evitar que pueda entablar una relación indebida con algún plebeyo, se le prohibió tener amigos distintos a cualquiera que su padre le permitiera tener, en otras palabras, no los tenía. Ahora que tiene 18 años, se encuentra en edad para casarse, y Maurice no ha desperdiciado ni un segundo para conseguirle un pretendiente dispuesto a casarse con ella, y tengan al menos un hijo varón lo antes posible.

Temprano por la mañana, Eleanor Wolf es llevada por sus sirvientes al vestíbulo de su hogar, allí su padre la está esperando junto a un hombre. Maurice se acerca a su hija para hacer las presentaciones - Eleanor Wolf, quiero que conozcas al Duque de Reihenhal, Emer Van Hor. Él se encuentra aquí hoy para pedir tu mano en matrimonio, por favor sé respetuosa y cortés-. La joven muchacha solamente observa con sorpresa al hombre frente a ella, y con un saludo algo indiferente le dice - Es un placer conocerlo, mi lord-.

Van Hor, un hombre de grandes riquezas, un porte elegante, de 39 años de edad y que está absolutamente maravillado por la belleza de Eleanor, ya comienza a ver a esa muchacha como su nueva esposa. - Es un placer conocerla, hermosa dama, espero de verdad quieras convertirte en mi esposa, y así volvernos una gran familia-. Le dice el duque a la que ahora es su prometida y ella no puede evitar solamente estar viendo a su padre; como queriendo decirle con la mirada que no le gusta la idea de casarse con ese hombre.

Así, después de las respectivas presentaciones, el virrey llamó al duque y a su hija a un banquete para que pudieran celebrar esa "gran noticia", en son de conmemorar el nuevo compromiso de Eleanor y Emer. Después de una no complaciente cena, con el Duque hablando incesantemente sobre todo lo que él ha logrado, pero también sobre lo que ha perdido, es allí donde Von Hor cuenta que la joven Wolf sería su quinta esposa, las otras lo abandonaron por ciertas circunstancias, con lo que ella queda algo asombrada al escucharlo.

Al terminar la comida, el duque se despidió del virrey con una cortesía y de Eleanor con un beso en su mano, diciéndole que vendrá por ella en diez días para dar inicio con los preparativos para la boda. Van Hor parte hacia Reihenhal, Maurice se acerca a su hija para decirle - Junto a él, tu futuro está asegurado, hija mía, se una buena esposa-.