✖Muke.
✖Gay
Michael era el gatito rebelde, nadie sabía por que era así de distinto, todos los demás habían aceptado ser sumisos desde temprana edad, pero Michael era diferente de todos ellos y esa diferencia llama mucho la atención de Luke.
Todos l...
Calum solía moverse muy rápido cuando era niño, adoraba correr por el instituto y jugar a las carreras con los demás híbridos quienes llegaban a ser un poco crueles porque la cola de Calum solía enredarse en sus pies y caía al suelo, con el pasar del tiempo el moreno decidió correr solo y se separó de esos híbridos groseros.
En la actualidad Ashton lo obligaba a subir y bajar las escaleras lentamente, para evitar cualquiera de los tantos accidentes que había sufrido en todos estos años. El híbrido sabía que su dueño odiaba que corriera pero no pudo evitar hacerlo esa vez, subió lo más rápido posible y se metió en el baño, desesperado por vaciar su estómago en la taza del inodoro. Calum se sentó en el suelo y apoyó su espalda contra la pared para evitar caerse por el mareo, no era usual que se enfermara del estómago.
Llevó una de sus manos a su abdomen y soltó un maullido, primero sintió el reciente pircing que Michael le había insistido en hacerse y esperaba hacerlo pero no esperaba sentir lo segundo, fue sorprendente y sus emociones se descolocaron en todas las direcciones posibles, sintió duda, luego angustia, seguido de miedo y de una increíble felicidad que prácticamente lo hizo llorar.
Calum no era tonto, sabía lo que sucedía y no estaba seguro de quien era la culpa. En primer lugar, Ashton prometió nada de sexo luego de proponerle matrimonio para así disfrutar más a fondo su luna de miel y, por lo tanto, Calum decidió dejar de tomar pastillas para evitar nuevos gatitos, pero sin pensar en la posibilidad de que cierto felino de orejas blancas lo llevaría a hacer una travesura la cual terminó con Ashton terriblemente molesto y excitado al ver el pircing en su ombligo.
Calum rodó los ojos, Michael sería el padrino del niño o niña y lo obligaría a ayudar cuidarlo al menos una vez por semana, después de todo era medianamente su culpa. Estaba seguro de que esta sería más que una sorpresa para Ashton, sentía temor por su posible reacción pero algo le decía que de ninguna manera le haría daño al bebé. El moreno sonrió al pensar en un pequeño híbrido entre los brazos, observando todo el mundo exterior con los ojos color hazel de su padre ¡De verdad quería que su hijo u hija tuviera esos ojos!
Sus pensamientos se vieron interrumpidos por el típico sonido que hacía el auto de Ashton al detenerse en la entrada y se levantó, dispuesto a decirle toda la verdad. Calum no podía mantener un secreto por mucho tiempo, no era bueno en ocultar cosas tan grandes como el futuro pequeño Irwin creciendo en su cuerpo. Limpió el baño antes de mojarse la cara y juntar valor para contarle a Ashton.
— ¡Estoy en casa, Cal! — Exclamó Ashton como siempre hacía pero fue extraño que Calum no lo estuviera esperando. El mayor apretó los labios, su híbrido siempre lo esperaba ansioso, lo abrazaba y se besaban por unos minutos, Calum siempre lo extrañaba ¿Qué había de diferente esta vez?
— Ashy...¿Podemos hablar? — Preguntó temeroso desde las escaleras, ni siquiera se había acercado a preguntar o siquiera a saludarlo como siempre. Ashton se preocupó, lo que fuera parecía ser muy serio.
— ¿Qué pasa? ¿Estás bien? ¿Que sucede? — Su voz sonó alterada y Calum bajó las orejas con algo de timidez ¿timidez? Ashton no entendía nada. El híbrido asintió y se metió a su habitación, dejando al mayor con aún más intriga.
Ashton dejó su chaqueta a un lado, sin importarle si caía en el suelo o no y subió las escaleras rápidamente. Al abrir la puerta se encontró con su híbrido bajo las sábanas, sus orejitas negras seguían bajas y su cola estaba enganchada en su pierna. Calum soltó un maullido y mordió su labio inferior, quería decirle pero las palabras estaban atascadas en su garganta.
— Oh, Cally, ¿Qué pasa? Ven aquí, gatito, yo te tengo.— Se metió bajo las sábanas y Calum rápidamente se acurrucó en su pecho. Ashton acarició detrás de sus orejas, consiguiendo calmarlo al menos un poco.— Dime que sucede, mientras más rápido me lo digas, más rápido podremos resolver este asun...—
— Seremos padres.— Dijo rápidamente pero fue suficientemente lento para que Ashton lo comprendiera. Calum levantó la mirada para ver a su dueño, parecía que su corazón se había detenido por un segundo y sus ojos hazel estaban estáticos.
— ¿E-estás...estás embarazado? — Finalmente reaccionó y tomó la cara de su híbrido con ambas manos, mirando fijamente a sus ojos color chocolate.
— Si..— Susurró, un poco desconcertado. Sintió un poco de miedo pero al instante todo cambió.
— ¡Oh por dios! ¡Seremos padres! ¡Calum seremos padres! — Exclamó con clara emoción en su voz y una boba sonrisa en los labios. El híbrido no aguantó más y rodeó su cuello, comenzando a llorar de alivio y quizá porque sus hormonas estaban más alteradas que antes.— Cally, amor, bebé, gatito, ángel, te amo tanto ¡tendremos un bebé! — El tono de felicidad era completamente claro y Calum rio aún con lágrimas en el rostro, lágrimas que Ashton limpió con sus pulgares.
— También te amo, mi bebé tendrá el mejor padre del mundo.— Logró articular, aún seguía sintiendo un nudo en su garganta pero levantó las orejas con más alegría. Ambos sonrieron y se besaron cortamente.
— Dejame ver.— Recostó a Calum de movimiento rápido y subió su camiseta hasta por arriba de su estómago. El híbrido bajó la mirada justo a tiempo para observar a Ashton besando su abdomen, justo donde estaba su futuro hijo u hija.— Los amo a los dos..— Susurró, y quizá Calum comenzó a llorar nuevamente ¿Quién podía desear un mejor padre para su bebé?
⚋⚋ ¿Les gustó? Hacer Cashton me encanta ❤
¿Qué opinan sobre su futuro hijo u hija?
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