Diecisiete.

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Narrador omnisciente.

Michael frunció el ceño en cuanto Luke se frenó frente a esa tienda en específico. El rubio no se había detenido para mirar ropa o herramientas u otra cosa normal, bueno, no es que ese lugar fuera algo anormal pero no mucha gente se frenaba para observar los delicados anillos con incrustaciones de piedras preciosas. Anillos de casamiento. Ca-sa-mien-to. Michael se repetía esa palabra en su mente una y otra vez e incluso intentaba de llamar la atención de Luke para que se alejara de esa vidriera lo más rápido posible.

— L-luke..¿Podemos volver al hotel? No me siento muy bien. — Preguntó con nerviosismo, sin atreverse a mirar ni una sola vez el anillo que sus ojos azules habían mirado con detenimiento. Luke despegó la mirada de ese anillo de 18k con un hermoso diamante brillando en el medio para mirar a su gatito.

— Um, si. Solo estaba viendo ese anillo, Ashton me pidió que lo ayudara a elegir uno hace poco. — Dijo tranquilamente y el híbrido sintió el aire regresar a sus pulmones en cuanto esas palabras salieron de su boca, el anillo no era para él. Michael se acercó un poco más y miró el pequeño anillo, imaginando el rostro del hiperactivo híbrido de ojos color chocolate al verlo...estaba seguro de que Calum era capaz de desmayarse en medio de la proposición.

— No sabía que Ashton estaba pensando en casarse. — No pudo evitar el tono de sorpresa. Luke asintió y su pulgar acarició la mano de Michael la cual estaba entrelazada con la suya.

— Su aniversario de 5 años es en dos días y está pensando en llevarlo a París para pedir su mano. — Explicó y Michael sonrió casi al instante, dos días y Calum lo llamaría gritando sobre su boda y probablemente sobre lo increíble que se siente hacer el amor después de una propuesta matrimonial.

— Me encantaría ir a París. — Dijo en un tono juguetón y Luke rodó los ojos mientras sonreía. Michael amaba viajar en incluso se sentía un poco triste cuando pensaba en dejar Londres tan solo en dos días, adoraba esa ciudad y a todos sus rincones repletos de historia antigua.

— Quizá cuando sea mi turno te llevaré a París. — Susurró en su orejita blanca y algo en el estómago de Michael se revolvió con fuerza al pensar en eso. Sabía que Luke estaba loco, tanto como para entrar a esa tienda, comprar un anillo y proponerle matrimonio frente al ojo de Londres. Sería romántico pero vomitaria si hiciera algo así. — Tranquilo, gatito, tenemos tiempo antes de que eso pase. — Rio y besó su mejilla enrojecida. Luke podía notar el nerviosismo de Michael, siempre que estaba nervioso bajaba la mirada y su cola no paraba de moverse de izquierda a derecha. Michael rodó los ojos y soltó un suspiro por lo bajo, por lo menos Luke esperaría un poco más.

— Me duele el estómago. — Soltó un pequeño maullido de dolor al final de la oración. Habían almorzado en McDonald's  y estaba casi 100% seguro de que esa hamburguesa tenía algo extraño, no podía creer que Luke lo haya convencido de comer esa cosa que pretendía ser carne.

— Casi llegamos al auto, vamos al hotel y te tomas un baño ¿si? — Rodeó su cintura con cariño y lo miró un tanto preocupado. En la mañana había notado las mejillas de Michael rojas y aún seguían de ese mismo color ¿Acaso se estaba enfermando? ¿su lindo bebé se estaba enfermando?

Luke sintió aún más preocupación cuando las manos de Michael apretaron su estómago y suaves maullidos brotaron de sus labios en el camino al lujoso hotel. Maldijo mentalmente por conseguir un hotel a las afueras y le preguntó a Michael si necesitaba ir al hospital pero el híbrido dijo con toda seguridad que solo se trataba de un dolor estomacal. Sin embargo, Michael nunca había experimentado tanto dolor, podía sentir el sudor bajar por su cuello y el calor aumentar en el auto. El híbrido de pronto sintió el dolor disminuir en su estómago pero...no se fue sino que se desplazó hasta una zona más baja. Los ojos verdes del minino se abrieron sorprendidos al darse cuenta de todos los síntomas y no le quedó duda alguna cuando empezó a sentir sus jeans negros humedecerse. Definitivamente estaba experimentando su primer celo y en cuanto lo dedujo, su mirada se clavó en Luke.

Michael tenía que admitir que se veía cien veces mejor que cualquier otro día y apostaba a que se debía por sus hormonas pero también sabía que su dueño era sumamente atractivo. Sus brazos estaban estirados mientras agarraban el volante con fuerza y relamió sus labios al ver sus bíceps escapar entre la tela de su camisa manga corta. Luego miró un poco más abajo y se preguntó si Luke se molestaría mucho si empezaba a tocar su entrepierna mientras conducía, incluso estaba pensando en detener el auto ahí mismo y subirse a su regazo para montar su miembro pero no era posible, estaban en medio de una ruta bastante transitada. Soltó un gruñido. Se fijó en su rostro, especialmente en esos carnosos labios rosados que parecían llamarlo a gritos cada vez fuerte.

— ¿Qué sucede? — Preguntó preocupado al notar su mirada fija. Sus ojos azules lo miraron de reojo por un segundo y volvió la vista a la ruta. Michael mordió su labio, recordando la forma en la que ese celeste claro se transformaba en un azul oscuro cuando lo llamaba..

— Daddy..te necesito.

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Esto es lo más interesante que me pasó en estas vacaciones, les juro que cuando lo vi me puse a llorar :') Creo que es como un sueño frustrado que tenía  (by the way Mi cuenta de Twitter es "Ashlove5seconds")


¡Actualizaré pronto!
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No daddy (Muke) Completa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora