Capítulo 34 《parte 1》

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Christian

-Tengo que deciros algo- todos me miran interesados- voy a por Mara- les digo

Todos siguen mirandome sin decir nada. Callados. Esto me está asustando. Pero de repente...

Todos empiezan a aplaudir

-¡Ya era hora!- grita Sheila

-Por fin reaccionas hermano- sigue diciendo Camel

-Bueno... entonces... ¿Papá, mamá?- pregunto

Mi padre se levanta todo serio y es cuando pierdo la fe en todo.

Se acerca lentamente y cuando menos me lo espero me está abrazando.

-Me alegro de que hayas dado el paso hijo- me da unas palmadas en el hombro.

Cuando me doy la vuelta mi madre también me está abrazando.

-Estoy muy orgullosa de ti Christian- se separa y mira a mi hermano- vuestro padre y yo estamos orgullosos porque no sois como todos los niños riquillos de aquí.- abraza a Sheila y sigue- Habeis encontrado a dos personas que no estaban en la mejor situación y en vez de reiros de ellas o simplemente actuar como si no existieran las estáis ayudado todo lo que podéis y no les habéis dejado solas. Estoy muy orgullosa porque eso es todo lo que quería para vosotros. El respeto, la bondad pero sobretodo, la humildad. Ahora sabemos que los dos seréis grandes padres, esposos y amigos y eso no nos puede hacer más felices a vuestro padre y a mi- poco a poco todos estamos abrazados- asique ve por ella y nosotros te ayudaremos en lo que podamos-

Abrazo a mi madre y le lleno la cara de besos

-Todo esto no sería posible sin vosotros. Tenemos los mejores padres- digo yo

-Los mejores sin duda- sigue Camel

[...]

Está todo arreglado para ir a Barcelona. Han pasado unos cuantos días y ya hemos hablado con la directora del colegio, he avisado a mis amigos y he dado las gracias a Aarón y su novia.

Me monto en el avión con Camel y Sheila unas filas más atrás que yo y miro por la ventana.

-No te dejaré nunca más- susurro

Sigo mirando por la ventana y entre las nubes veo su hermosa cara. Todo me recuerda a ella pero cada vez estoy un poquito más cerca.

**
Te amo-me dijo mi hermosa Mara- No me dejes nunca, te necesito para respirar, cada día que me levanto y huelo tu aroma o estoy apoyada en tu pecho soy un poquito más feliz. Se que alomejor no te merezco,-me mereces más que nadie- se que alomejor soy demasiado poco para ti,-tu eres todo para mi, todo.- pero soy lo suficientemente egoísta como para querer que seas mio. Eres mio y de nadie más. Y si en algún momento te dejo de gustar o te aburres de mi solo te pido que me dejes y me lo digas, pero no me engañes porque creo que mi corazón no podría aguantar algo así-
**
No te he engañado pero tu corazón ya no va a sufrir más. Lo prometo. Ya nada nos va a separar.

[...]

Ya estamos aquí. Aún no estoy con ella y ya estoy hiper nervioso. No se que le voy a decir ni que voy a hacer. Solo tengo mezcla de tres emociones. Alegría, esperanza y miedo.

Alegría, porque la voy a poder volver a ver. La voy a poder tocar y poder oler su delicioso aroma.

Esperanza, porque considero que es lo último que se debe perder y tengo esperanza de que me perdone.

Y miedo, porque temo a que me rechace y ya no quiera estar conmigo. Yo no sé que haría.

Me sé la dirección del colegio de Mara y la de su casa ya que me la dio por si algún día cuando estabamos bien la iba a  visitar.

Te necesito... Mi AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora