Cap.54 Π♦Eres mía♦Π

1.6K 119 7
                                    

Alto contenido sexual. Para +18. Leer bajo su propia responsabilidad.  —Marukenzi.

Con su debo pulgar levantó mi rostro.

-Dejate llevar y sólo disfruta, te aseguro que no arrepentirás de esto, Barbie —Besó mi cuello y mordisqueó a la vez.

Después de todo, quedaría un recuerdo bueno, si algo llegará a pasar. Me arriesgaría ¿Qué podría salir mal?

Volví a acercarme a su rostro, y sin decir una palabra más, ni oponerme. Juntamos nuestros labios en un beso lleno de ímpetu, pasión, viveza.

Otra vez levantó mi camiseta y se detuvo antes de quitarla por completo, esperando mi autorización.

Asentí segura de lo que deseaba. Terminó de quitarla, acarició mi espalda, deslizando sus manos hasta mis muslos, de allí me tomó e hizo que volviera a rodear mis piernas en su cintura. Gemí cuando me alzó y tuve un rose con su gran erección.

Con cuidado me puso sobre la cama y se colocó sobre mi, prácticamente sentado, pero si dejar su peso.

Besó mis labios otra vez, por unos minutos, para luego bajar a mi cuello, formando un camino de besos de mi clavícula a la comisura de mis senos.

Sus mano se dirigieron al elástico de mi short, lo quitó y al mismo tiempo acarició mis piernas, haciendo que soltara pequeños gemidos.

Ascendió a mi cuello, dejando besos húmedos allí. Me incliné hacia delante, pase mis manos suavemente desde su nuca, su pecho, deteniéndome en el bordillo del pantalón que él lleva, con torpeza trate de quitarlo, y lo logré con su ayuda.

Comencé a besar su cuello, y a morderlo en el mismo lugar, mientras acariciaba su cabello. Él me tomo de las caderas y me apegó más a él, haciendo que nuestras intimidades se rozasen, provocando que mi cérvix se suavizase. Un enorme cosquilleo se hizo presente en mi entrada.

Se tumbó otra vez en la cama, pero sin aplastarme, mantenía todo su peso en sus codos, besó mis labios con vehemencia, hizo presión con su lengua, pidiendo permiso para el acceso de la misma, entre abrí la boca y él metió su lengua, la cual acarició la mía y exploraba cada centímetro de mi boca, como yo la suya. Bajó a mi cuello y de mi cuello a mis senos, allí se detuvo por unos minutos y me observó con lujuria, con deseos, sentí como me ponía más roja de lo que seguro ya estoy. Él sonrió y tomó mis manos con una de las suyas, llevándolas arriba de cabeza. Otra vez enfocó su mirada en mis senos, besó la comisura de uno de estos, y los lamió, mordisqueo -suave- mis  pezones, ya erectos, mientras que con su mano libre acariciaba lentamente el que estaba desocupados. Cambió de uno al otro, gemí de placer, por sus actos.

Aún tomando mis manos, besó mis labios, deslizó su mano libre por mi abdomen, llevándola hasta el borde de mi braga, metió su mano por dentro de esta, gemí por la cercanía de su mano en mi sexo. Con su dedo pulgar comenzó a hacer pequeños masajes circulares en mi clítoris, haciendo retorcer bajo si cuerpo. Soltó mis manos, y con suavidad -acariciando también mis piernas- quitó la única prenda que me cubría. Volvió a hacer lo mismo otra vez en mi clítoris. Estaba excitada y él notablemente igual. Besaba su cuello mientras él hacia esto, lo cual me fascina. Mordí varias veces su cuello.

-Jayden —Gemí jadeante en su oído cuando él introdujo un dedo en mi vagina.

-Barbie —Dijo el de igual manera que yo— Si quieres puedo parar —Su voz es ronca.

Definitivamente esta excitado. No dije nada ante su comentario, por lo que el continuó.

Dejo de jugar con mi intimidad y paso a lamer mi labios y morderlos, mientras él hacia esto busqué el bordillo de sus bóxer, tratando de buscar, accidentalmente rosé mis manos por su amiguito, él gruñó por eso y yo mordí su lengua.

Subí mis manos a sus caderas, encontrando el elástico del bóxer y los retiré con ayuda de él.

Volvió a inclinarse hacia adelante haciendo que yo volviera a quedar inmóvil bajo su trabajado cuerpo.

Me besó por última antes de  colocarse entre mi piernas y yo gimiera fuertemente, al penetrarme suave pero profundamente, haciendo que sintiera un leve dolor en mi vagina y me inclinará hacia delante, enterrando mis uñas en su espalda.

Sus movimientos comenzaron  siendo suaves, para que me acostumbrara a tenerlo dentro de mi. Comenzó a mover su cadera con más agilidad, mientras deslizaba sus manos mi cuerpo ó callaba mis gemidos estampando sus labios contra los míos.

Ya me había acostumbrado a sus movimientos. Él ascendió la velocidad, y gemí fuerte, él me cayó con un largo beso, para nada inocente. Con sus embestidas, cada vez más rápidas, mis músculos vaginales hacían que las paredes del mi intimidad se contrajeran y apretarán su pene dentro de mí. A lo que Jayden gemía y abrí los ojos como platos. Bajó la velocidad por unos segundos, para volver a ascender.

En la habitación sólo eran presentes nuestros gemidos y jadeos.

Los primeros espasmos se hicieron presentes en mi y mi vagina se contraía, dándome a saber que estaba llegando al orgasmo. Si definitivamente había llegado.

Jayden continuó lentamente, esperando liberarse.

Nuestros cuerpos ya estaban sudorosos por la gran escena, sus fuertes embestidas, como ya había dicho eran lentas y despacio, volvió a moverse más rápido y minutos después sentí ese líquido caliente, se había corrido dentro de mí.

Nos besamos apasionadamente, yo acariciaba su espalda, él salió de mi despacio y sin prisa, mientras me miraba a los ojos.

-Eres mía —Susurró a mi oído con voz ronca, haciendo que me estremeciera.

Se dejó caer sobre mi sin hacerme daño, mientras tomaba aire, regularizaba su respiración, al igual que yo.

Dejo un tierno beso sobre mis labios. Y se acostó a mi lado cubriendo nuestros cuerpos con el edredón, y yo acorrucarme en su pecho.

-Te amo Barbie —Depósito otro beso en mi labios.

-Yo te amo más, Diablo —Dije cansada, pero diciendo la verdad.

Sonrió satisfecho, de igual manera yo hice lo mismo. Rodeó mi cintura, recosté mi cabeza en su pecho. Acaricia mi brazo desnudo y hace dibuja pequeños círculos, en demostración de cariño.

Me deje llevar por el cansancio, cayendo en un profundo sueño bajo sus brazos, sabiendo que en sus brazos estoy segura.

-Descansa Barbie —Lo escuché decir entre sueños y también seguir el beso que dejo en mi cabeza.

Ya era definitivo que....¡Lo amo!




§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§

¿Les gusto? 😏

#Venecia❤

#Devil😈😍

Voten★ &comenten.

Cap.#54

Illegali di Diamanti #RedQueenAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora