Lizzy esperaba apoyada sobre el cantero de un edificio antiguo en las inmediaciones del Barrio Chino, miraba su celular, volvía a mirar, aún faltaban veinte minutos para el encuentro con Darcy. Luego de intercambiar unos mensajes por la mañana se habían puesto de acuerdo en encontrarse en ese lugar para ir juntos a ver al apoderado de las galerías, Elizabeth quería mirar el edificio y escuchar de qué se trataba la obra que demandaban antes de formar parte del proyecto. Llevaba su agenda y algunos artículos especiales que usaba para tomar notas, fotos, medidas antes de confirmar si el proyecto le interesaba.
Un auto de color azul se aproximó, ella se imaginaba a Will en un auto parecido al de la noche anterior , cuando recordó que ese no le pertenecía. Este auto, que para ella podía ser cualquier marca de auto fino que puede verse en Londres le llamó la atención, era especial, Rolls_Royce decía al costado, y se veía como una limusina pequeña, se incorporó rápidamente, tomando con una mano su cartera y acomodándose la ropa con la otra. No se sentía vestida para la ocasión, eran casi las dos de la tarde pero junto a ese auto, nadie podía sentirse bien vestida. Él detuvo el auto y se bajó rápido a abrirle la puerta y a buscar algo en el baúl.
Ella no estaba acostumbrada a tanta caballerosidad, se sentía observada, pero todo le gustaba. Elizabeth había tenido pocas relaciones amorosas y ninguna había valido la pena verdaderamente. Nunca la habían amado como ella necesitaba, ella pensaba que nunca se había enamorado de nadie verdaderamente.
Lizzy contemplaba para lo que servía ser millonario, dentro del auto la temperatura era ideal, un aroma exquisito, tapizado de terciopelo gris claro en las butacas, un especial tono en los vidrios que impedía que el sol de la tarde molestase. Estaba fascinada y entendía que ese auto era de lujo.
Darcy se había acercado a besarla en la mejilla al abrirle la puerta y su aroma se había quedado impregnado en su nariz, riquísimo, un aroma que no cansaba, se parecía al aroma del jabón que usaba su papá cuando ella era niña. Su padre, un hombre tan correcto y amigable cómo podía parecerse a Darcy. Eran detalles insignificantes para otros los que hacían que ella viera a Darcy familiar y sintiera ternura.
Se sentía atormentada ¿Darcy familiar? Era capaz de pensar todas estas cosas en un instante, desde que lo había visto por primera vez, era incesante su pensamiento y a penas habían pasado treinta horas. Hacía conjeturas, asociaba gestos, inventaba historias, y sentía unos profundos deseos de apropiarse del apuesto hombrecito ideal.Darcy subió al auto luego de buscar un maletín del baúl y una bolsita blanca. Dejó el maletín en el asiento trasero y le entregó la bolsita que tenía un pequeño moño rosa.
_ ¿Cómo estás, tanto tiempo? _ le dijo mirándola a los ojos mientras abrochaba su cinturón y le acercaba una bolsa blanca con moño de regalo.
Ella quería desaparecer, ¿Tanto tiempo?, hace menos de doce horas que nos despedimos, pensaba mientras sostenía la bolsa en sus manos y él no dejaba de mirarla.
_ Es para vos, un regalo, no pienses que es mío, digamos que es mío porque lo acepté para vos, pero no lo elegí para vos_continuó él con desenfado.
_ Gracias_ esbozó Elizabeth sin entender, manteniendo el paquete sin abrir y sintiendo su respiración acelerada, Darcy un regalo, el auto la mirada, cada cosa la ponía más nerviosa.
_ Es tuyo podés abrirlo, una de mis reuniones de hoy fue con una de las representantes de Dolce & Gabbana y me llevaron este presente para mi prometida _ Darcy sonrió.
_ ¿Tu prometida?_ Lizzy no podía con los nervios, sabía que no tenía que ver con ella ese relato.
_ Se esfuerzan en buscarme una novia, intentan presentarme a alguien desde hace cinco años. Me agotan, entonces hoy cuando me acercaron el regalo, lo tomé y les agradecí diciendo que se lo daría hoy mismo. Todos se quedaron impactados, creo que ya no van a seguir atormentándome con la pregunta sobre mi vida personal y tú te has ganado aquí tu hermoso y último perfume de su carísima marca_ Darcy hablaba como si celebrara una victoria.
ESTÁS LEYENDO
El sueño de William Darcy
RomanceWilliam Darcy, un reconocido arquitecto inglés, viaja a Londres por negocios. Bastante confuso despierta una calurosa mañana de julio de 2017 en su departamento de Oxford Street. Sentía ruidos atípicos, todo parecía andar muy rápido, tenía...