Capítulo 4: Vee

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Tuvimos que mudarnos con mis papás otra vez, pasé meses intentando que Patch se adaptará a su nueva vida, lleve a mi esposo en repetidas ocasiones conmigo y los niños, cuando llegamos a la casa que Nora había heredado de su mamá difunta, estaba con las ventanas y cortinas cerradas, casi no había basura en la casa, pero el polvo... De eso había un montón, en todos lados, cada vez que íbamos, no había desorden en toda la casa, solo en la habitación de... El, la cama totalmente destendida, polvo, basura de frituras en el suelo, empezaba a querer apestar ahí pero... A Patch no parecía importarle.
Lo que más nos preocupaba es que el parecía ido... Aveces  mi amorcito le hablaba pero el reaccionaba tardío y taciturno, se veía tan mal que decidimos visitarle 1 vez cada semana y limpiábamos la casa, llevábamos víveres, aunque el no parecía ocupar mucho yo lo usaba para hacer comida los días que íbamos, la siguiente semana a la muerte de Nora, el comenzó a ducharse y limpiar un poco antes de que llegáramos, era algo pequeño... Pero era un progreso.

La verdad verlo me recordaba a Nora, lo que habría dicho a un comentario que hice, alguna broma que le habríamos hecho a Patch o mi amorcito... Todo me albergaba de tristeza, había ocasiónes en las que saliendo de la casa de Patch me ponía a llorar.
Todo me era insoportable, y me entró una gran curiosidad sobre la muerte y comencé a comprar libros, película, folletos, documentales e incluso la biblia, hasta que me harté de buscar alguna cosa que me consolará. Me preguntaba que le había pasado a Nora. ¿Era un fantasma o qué?, ¿Podíamos comunicarnos con ella?. Con esas preguntas decidí que era hora de buscar a alguien que podría responder. Hablé de eso con Gavin el como siempre... Tan comprensivo conmigo dijo que me apoyaba. Con ese pensamiento salí a buscar a alguien... Sabía a quien podía contestarme, a Basso, había oído rumores de que vivía actualmente en Nueva York, ahí también escuché que nuevos Ángeles caídos estaban causando problemas y Basso estaba ahí controlando un poco las cosas. Llamé por teléfono.

- Gavin... Amorcito, he oído que Basso el anterior amigo detective de Nora y mío vive en Nueva York, y...

- Lo sé, cariño... Los niños... Bueno ya no son tan chicos y... Creo que podré encargarme de todo por aquí unos días más- dijo Gavin, pero hubo algo que me preocupo un poco fue que comenzó a toser.

- Amorcito... ¿Estás bien?- dije preocupada

- Claro querida... Sé que esto es importante, así... Que ve... Ánimo...- dijo entre tocidos.

- Gracias!!! Te amo. Te llamo más tarde, llamaré a mi jefe.

Luego llame al mierda de mi jefe, aunque un poco de malas, dio el afirmativo. Me dijeron que Basso estaba por 5 Th Street Avenue, salí inmediatamente al aeropuerto, hacia un hotel, nada higiénico por cierto, a la dirección de Basso. Llegué tocando en cada edificio buscando, dudando que siguiera usando el mismo nombre y la misma profesión para esconder su verdadera identidad, hasta que...

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