Restart

Capítulo 26: Alix.

Escucho la voz de mi madre entre susurros tan pequeños que no entiendo lo que dice, siento un suave sangoloteo en mi brazo.

- Alix, Alix, ve a dormir a tú habitación, cariño.

- ¿Qué? - dije en una voz que sonó a gruñido por lo soñolienta que estaba aún.

- Si a tú habitación. Te torceras el cuello. ¿Quieres mejor una taza de café mejor? - dijo sonriendo.

- Ah, no... - dije confundida - digo, sí, por favor - dije incorporándome.

Era mejor despertarme, debo pensar en mí extraña... ¿Realidad?¿O fue una pesadilla?

- Ok - dijo mi mamá mientras caminaba hacia la cocina.

Tome mi café con galletas un poco distraída, pero después de hacerme la observación mi mamá ya no me preguntó nada cuando le dije que estaba bien. Le dije que me iría a dormir, me despedí.

¿Eso fue un sueño? Pero no recuerdo haberme dormido ¿Qué fue lo que realmente sucedió?

Vi un rostro que desde hace un año ha estado siguiendome, es simplemente horrible, y luego... Ojos negros, una voz tranquilizadora y... Luego ya estaba en mi casa.

Era mejor no pensar en ello. Me fui a dormir con toda la intención de olvidar lo que pensaba.

A la mañana siguiente, estaba tan confundida con aquello que decidí preguntarle a la persona que menos quiero... Cipriano.

Llegó al trabajo buscándolo pero veo que habla con Stephen, sacude su mano, Cipriano me ve pero no responde, tal vez, si pasó algo ayer. ¿De qué estarían hablando? Stephen me hace un gesto para que me acerque a él, dudosa, camino hacia ellos.

- Alix ¿Te sientes mejor? - dijo Stephen.

- Esto... Si ¿Por qué? - ¿A dónde va ésto?¿Qué le dijo ése tipo?

- Patch dijo que ayer te sentiste mal y que te llevó a casa - Contestó a mí preguntá no formulada - ¿Estará bien que te quedes aquí hoy?

- Por supuesto, hoy me siento con mucha energía - dije lo más convincente posible.

- Es que estos días estás muy pálida - dijo Stephen acercando su mano a mi mejilla, me aparté - ¿Eh? Lo siento no quería... - dijo dando un pasó al frente y yo uno atrás.

- ¿Eso es todo? - dije muy nerviosa.

- Sí - dijo decepcionado tal vez extrañado por mí comportamiento, pero no había opción, últimamente me daba una mala sensación estar cerca de los demás.

Me fui a mi lugar. Era momento de hablar con Cipriano, me acerque un poco para hablar bajo. Pero el se apartó ¿Qué rayos? Intenta besarme el día anterior y ¿Ahora se aparta?

- Debo hablarte de... Algo - dije un poco desbalanceada por su movimiento.

- mmmm... ¿Puede ser rápido? Estoy ocupado.

- Ah... Claro - no podía hablar con él si tenía esa actitud - Mi... Celular tiene algo, es que no puedo cambiar el fondo de pantalla.

Me siento total y completamente estúpida.

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Hola, aquí su escritora Misa, espero que estén bien.
No he actualizado porque no tenía internet pero no sé preocupen, actualizaré un poco más de ahora en adelante. Disculpen mis faltas de ortografía.