29» Kim Ryujin

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Las bocinas sonaron con la música que indica que finalizó la jornada. Recojo mis cosas sin prestarle mucha atención al hecho de que Jungkook no me acompañará a casa. Estamos siguiendo el plan de Jimin, y parece que está funcionado. Seul Bi se ve confiada y cada vez que me cruzo con ella en los pasillos me mira con superioridad. Jungkook camina tras ella siendo uno más del grupo de mi hermano. Taehyung no me ha mencionado nada acerca de eso, y es muy extraño, Jungkook afirma que tiene todo bajo control y que nadie sospecha.

Espero que sea así.

En los descansos me siento junto a Hoseok. Ese día, en la cafetería, cuando me excusé con Jimin y Jungkook diciendo que Hoseok me invitó comer un helado era mentira. Quería preguntarle acerca de Juuri, necesitaba saber si ella era la que tomaba las fotografías. Hoseok insistió en que no sabía nada, así que le dije que fuéramos a caminar mientras conversábamos, él accedió y terminó confesando que Juuri había actuado extraño las últimas semanas y tomado fotografías de nosotros. Él dice que no me contó nada porque ella se lo pidió, pero que nunca pensó que serían para ayudar a Seul Bi y a mi hermano.

Desde allí, dejó de juntarse con Juuri para acompañarme en los recesos.

Jimin usualmente se sienta conmigo, los ultimas días lo he visto en la cancha de baloncesto jugando con sus amigos, parece querer distraerse de todo lo que sucedió y ha manejado muy bien la situación con YoonGi.

Pero el último no lo he visto demasiado.

Tampoco he preguntado por él, así que no sé mucho.

— ¿Quieres ir a jugar cartas? —un par de chicos pasaron de largo mientras conversaban entusiasmados. Uno de ellos era Lee Hun.

Él todavía tiene vendajes por aquí y por allá, quizás no han cicatrizado sus heridas.

Seul Bi se levanta de su lugar y se dirige directamente a la salida. Al parecer Jungkook la espera al finalizar la jornada porque una que otra vez los he visto salir juntos.

No me molesta, para nada.

— ¡Jungkookie! —le escucho gritar. Recojo mis pertenencias para tener tiempo de asomarme por la puerta y verlos.

Una vez que metí todas mis cosas en la mochila, corro hacia la puerta haciendo el menor ruido posible. Seul Bi saluda entusiasmada a Jungkook, y le da un golpe en el hombro. Jungkook sonríe forzadamente y le hace una señal que no comprendo del todo.

— ¿Por qué? —pregunta ella. Al juzgar su tono de voz, está molesta.

— Tengo algo que hacer —responde él.

Seul Bi se gira dramáticamente hacia el aula y tuve que esconderme para que no me notara.

— Bien... —continúa—. Podemos caminar hasta la parada de autobuses.

— Tengo que quedarme para las clases de piano —Jungkook se ve incómodo.

— Está bien —Seul Bi se despide agitando su mano—. Te llamaré más tarde.

— Esperaré ansioso —le escucho decir antes de que otras voces inundaran el pasillo.

Suelto un suspiro mientras recorro la mirada por el aula, no hay nadie. Quizás debería irme lo más rápido posible, Seul Bi ya habría salido de la escuela.

Doy un paso fuera de mi escondite y casi de inmediato soy atrapada por dos brazos. Jungkook me obliga a caminar en reversa hasta que me apoyo en uno de los asientos y él cierra la puerta tras nosotros. No puedo evitar soltar un jadeo por la sorpresa.

Butterfly ➻ Jungkook [en edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora