BLOODY LOVE ; JUGHEAD JONES [2] ✅

Prólogo

PRÓLOGO

[ Días antes de la muerte de Jason ]

    Sonreí a la vez que alejaba el bol de mi hermano. Jason hizo un puchero que no sirvió de nada. Sacudí mi cabeza y me llevé un puñado de palomitas a la boca.

    ―Blazey, por favor ―suplicó estirando el brazo.

    Chasqueé la lengua para luego dejarle comer del bol. Estábamos viendo una película. Mis padres afortunadamente no estaban en casa, al igual que Cheryl, quien había ido de compras con sus amigas. Por algún motivo extraño Jason había preferido quedarse conmigo a aprovechar la oportunidad para ver a Polly. Era en estas ocasiones en las que la chica Cooper solía venir a Thornhill o Jason y ella tenían una cita. De todas formas tampoco me negué a pasar un buen rato con mi hermano. Permanecimos unos minutos callados mirando a la pantalla hasta que él rompió el silencio.

    ―Blaze... si yo no estuviera, ¿estarías bien? ―preguntó.

    Alcé una ceja divertida. En aquel instante me lo tomé a broma.

    ―¿A qué viene eso?

    ―Bueno, te veo sola y no quiero que, si llega el momento en el que tengo que irme de Riverdale, estés triste ―explicó con un toque de tristeza en la mirada.

    ―Tengo a Ella ―repliqué. Era mi única amiga, aunque no me importaba. Por aquel entonces estaba bien así―. Además, no creo que papá y mamá te dejen. Ya sabes que pretenden que sigas con el trabajo de la familia y honres el linaje de los Blossom.

    No me parecía bien, por supuesto. Forzándonos a continuar con la línea de sangre de los Blossom nos estaban cortando las alas. Era como ponernos una enorme piedra encima que nos impidiera seguir adelante. Lo que nuestros padres deseaban era acabar con todas las posibilidades de éxito individual, aplastarnos, destrozarnos para quedar a su merced.

    Mientras estaba en la sala de espera ―aunque tuviera que estar reposando en la cama― pensé en las palabras de Jason. Ahora que él no estaba, ¿me encontraba sola? La verdad era que no. Tenía nuevos amigos con los que podía contar, pero más que eso; tenía nuevos amigos a los que debía apoyar. Me gustaría pensar que, de haber estado Jason vivo, estaría orgulloso de la persona en la que me había convertido. ¿Qué iba a suceder ahora? El futuro era incierto. Ni siquiera sabía en qué estado me encontraba o si Fred se recuperaría. No tenía ni idea de cómo estaba Cheryl tras su intento de suicidio, pues no contestaba a mis llamadas. Vivía en una permanente ceguera; todas las respuestas habían desaparecido.

    Tomé la mano de Archie para darle fuerzas y soñé con un Jason feliz en una dimensión ajena.