Capítulo 40

3.2K 286 47
                                    

MARATÓN 2/4

CAPÍTULO 40

    "Es una aberración", "Eres una desgracia para esta familia", "Te has manchado la piel con la tinta de unos vándalos". Esas y muchas otras habían sido las críticas de mi madre hacia el tatuaje. Cheryl y Nana Rose, en cambio, habían permanecido calladas. Tal vez era que la abuela no se enteraba muy bien del tema. Quien sí era consciente de la situación era Cheryl, pero había preferido no dar a conocer su opinión. Si Toni esperaba que mi hermana se uniera a los Serpientes lo llevaba claro.

    ―No entiendo por qué querrías ser uno de ellos ―soltó de repente mi hermana.

    Íbamos de camino a la escuela. Parecía un día normal: llovía, la gente se apresuraba hacia el instituto y la campana sonaba para darnos la bienvenida. El paraguas rojo de Cheryl nos resguardaba de las finas gotas.

    ―Porque quiero formar parte de algo ―traté de explicar, aunque sabía que era en vano―. Quiero sentirme protegida y querida.

    ―Yo te quiero.

    Hice un mohín y no decidí no responder. El amor de Cheryl era selectivo. Si hacías lo que ella consideraba correcto te querría con toda su alma. Si te desviabas un poco descargaba toda tu ira sobre ti. Mi hermana era inestable y no podías confiar en sus promesas.

    ―¡Chicas! ¿Qué hay? ―Toni se apresuró corriendo a nosotras.

    Las tres entramos en el edificio y Cheryl cerró su paraguas.

    ―El tatuaje te ha quedado genial, Blaze ―comentó Toni a la vez que me guiñaba un ojo.

    ―Si por genial quieres decir horrendo, sí, le ha quedado genial ―gruñó mi hermana.

    La expresión de Toni lo dejó todo claro. Suspiró y tomó la delantera, dejándonos de nuevo solas. Justo cuando ambas parecían conectar, Cheryl volvía a cerrarse en banda. Era inútil.

    Me despedí de mi hermana y fue a mis clases.

    Me despedí de mi hermana y fue a mis clases

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

    ―Veronica, ¿estás intentando manipularme?

    Jug estaba tan enfadado que echaba humo. En un ataque de rebeldía les había enviado la cabeza de Pickens a los Lodge.

    ―Define manipular ―pidió Ronnie.

    Estábamos el grupo de siempre en nuestro sitio habitual. Disfrutábamos del descanso entre clases, si es que a esto se le podía llamar disfrutar. Archie parecía perdido en su mundo, pues tenía los ojos fijos en un punto desconocido de la sala. Betty tampoco se atrevía a entrometerse en la conversación.

    ―La gente se quedará sin hogar ―replicó Jug.

    ―Jughead, ¿por qué no vienes a casa con tu padre, habláis con el mío y resolvéis esto como personas civilizadas?

BLOODY LOVE ; JUGHEAD JONES [2] ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora