Los Jóvenes Titanes : " No Me Olvides " [ 2° Parte De " Perdoname" ]

Capítulo 31°

(Narración. Normal)

-¿Los Titanes Este?

-Ya están al tanto de lo sucedido- Robin siguió tirando de ella, obligándola a correr con él, corriendo por el largo pasillo.

-Pero...

-Sabíamos que esto podía llegar a pasar, por eso ideamos este plan-Robin no volteó su cara para verla,porque sabía que si la miraba a los ojos terminaría por arrepentirse- Los Titanes están distrayendo a Slade lo más que pueden pero es obvio que no tardará en venir, por eso tienes que irte antes de que...

-Pero yo no quiero irme...

-¡Tienes que hacerlo!-interrumpió él. La primera vez que esa idea se había propuesto,Robin fue el primero en negarse, no porque no le pareciera una buena idea, sino porque significaría separarse de ella y era algo que él no volvería a hacer. Pero Robin sabía que en la Torre, Starfire sería un blanco muy fácil y aunque no le gustara aceptarlo, era la única alternativa que les quedaba, aún si llegara la posibilidad de no volver a verla nunca más.

-¡No los dejaré servirse como carnada mientras yo huyo! ¡Es algo que me niego a hacer!-Dijo ella. Llegaron al garage y Robin finalmente paró de correr. Arriba suyo escucharon una explosión, seguido de un pequeño temblor.

-Entiende que no te estoy dando a elegir, te estoy obligando a hacerlo, yo y todos los demás- Robin siguió sin verla, en cambio abrió la puerta automática del garage y se quedó mirando la negrura de la noche, esperando al parecer la llegada de alguien.

-¡No tienen derecho! ¡No tienes derecho a obligarme,Robin!-Gritó ella, algunas lágrimas comenzaron a juntarse en sus párpados y poco a poco comenzaron a caer- ¡Yo no voy a irme!

-Si lo harás, aunque tenga que forzarte- dijo él mientras vío como a lo lejos dos luces se acercaban rápidamente desde la entrada. Robin giró hacia ella y trato de hundir esa presión en el pecho que hacía que sus ojos comenzaran a aguarse lentamente.

-¡Aléjate Robin! ¡No voy a irme!- Ella comenzó a retroceder, intentando apartarse de los brazos extendidos en el aire de Robin que intentaban agarrarla. Él se detuvo cuando vío el auto parar frente a ellos, iluminandolos a los dos por los faroles.
La puerta se abrió y Speedy bajó de ahí.

-¡Hay que irnos ya!-gritó. Robin asintió y antes de que Starfire pudiera impedirlo, la subió a su hombro y comenzó a correr hacia el auto.

-No!! ¡¡Robin, bájame!!-Ella intentaba desesperadamente bajar del hombro de Robin pero era incapaz de conseguirlo. No era como las otras veces que Slade la había cargado sobre su hombro y sacado del lugar, el sentimiento era diferente. Cuando Slade lo hacia, sentía miedo, pero enojo al mismo tiempo. Ahora era diferente, una enorme desesperación la hacia querer aferrarse a cualquier cosa para impedir subir al auto, más concretamente, para impedir alejarse de la persona que amaba.

Robin la bajó justo en el asiento trasero del auto y cerró la puerta. Las lágrimas comenzaron a caer, sin poder controlarlo, tanto en el rostro de Starfire como en el de él. Robin tomó su rostro y limpió algunas lagrimas. Sonrió.

-No quiero alejarme de ti...-dijo él-...pero quiero que vivas Star- Ella tomo sus manos e intentó retenerlo. Él se acercó a ella y con cariño implantó un beso en sus labios, pero se apartó cuando notó como ella intentaba aferrarse a él- No es una despedida ¿entiendes? Cuando todo termine volveré por ti, es una promesa-Sintió las cálidas lágrimas de ella bajar por sus dedos y con lentitud fue apartando sus manos de su rostro, pero no las soltó. Apartó la vista de ella y miró a Speedy- Asegúrate de que no te sigan.