They Don't Know About Us (Louis Tomlinson y tú)

•Capitulo 10•

—Déjame. —Le hablé, con notable furia en mi voz, e hice un fallido intento de soltarme. Sin embargo, él es mucho más fuerte que yo y volvió a acorralarme sin esfuerzo alguno.

Podía sentir su aliento rozar con mi cuello.

—¿Qué mierda quieres, Cameron?—Hablé, siendo directa.

Cameron Dallas, mi ex novio, también el único que he tenido.
Habíamos terminado hace más de un año, cuando descubrí que estaba con otra chica a espaldas mías.
Fue una de las cosas que más me dolió y me costó mucho superarlo.
Aún así, él creía que nuestra relación todavía no terminaba. Seguía buscándome e insistiendome, a pesar de que yo lo evitara constantemente.

—Te necesito... —Me susurró al oído. Se me puso la piel de gallina, varios recuerdos llegaban a mi mente con tan solo oírlo. Entre ellos, cuando lo encontré con esa chica, a punto de hacerlo.

—Suéltame —Volví a decirle, sin embargo hizo caso omiso a mis peticiones.

—Vamos a hacer esto por las buenas... o por las malas —Comenzó a acercarse a mi rostro.

Me di cuenta al instante hasta donde quería llegar.

—¡Que me sueltes! —Grité, ya muy enojada.
Entonces vi como él cambiaba su rostro a uno de furia y cólera ante mi grito. Su ceño se frunció a sobremanera.

Me amarró con fuerza empujándome contra la pared, haciendo que me golpeara. Cerré los ojos debido al impacto.
Irradiaba furia por los ojos.

Empezó a dejar besos en mi cuello, e intentó entrelazar nuestras manos pero falló.
Las lágrimas amenazaban con salir de mis ojos en cualquier momento.

—¡Déjame! —Volví a gritar, en un último esfuerzo. Sin embargo de nada serviría, estaban todos en sus respectivos salones los cuales se encontraban a una gran distancia.

Iba a volver a protestar, pero agarró mis manos y trató de besarme.

Yo ya tenía la cara cubierta de lágrimas.

—¿Acaso no oíste? ¡Que la sueltes! —Oí que dijo alguien a las espaldas de él.
Abrí los ojos, no podía ser quién yo pensaba.

Cameron se dió vuelta, totalmente enojado.

—¡Ja! ¿Y quién va a impedirmelo? ¿Tú? —Dijo riendo fuerte al ver que quien trataba de defenderme era Louis. Lo señaló con asco.

Yo aún no podía creer que fuera él, que fuera él mismísimo Louis Tomlinson quién estuviera ayudándome.

—Te lo digo por segunda y última vez, suéltala.—Lo amenazó, bastante enojado y apretando sus puños con furia.

—Es mi ex novia, puedo hacer lo que quiera con ella. —Dijo, triunfante, haciendo caras de superioridad —No tienes nada contra ello.

—Te estoy diciendo que dejes a mi... —Louis me miró por un par de segundos, y luego volvió su vista a Cameron .—Que dejes a mi novia en paz.

Abrí los ojos a más no poder. Acaso había dicho... ¿Novia?

Louis me hizo una rápida seña, para que se la siguiera. Inmediatamente comprendí su plan.

—¿Ustedes dos? ¿Novios? ¿No tienes una mentira mejor? —Le dijo Cameron, riendo a carcajadas. —Toda la preparatoria sabe que se odian a muerte. Buen intento, Tomlinson.

—Pues... —Louis me miró por momentos que parecieron eternos, para luego proceder a contestar.—Las cosas cambian.

La cara de arrogancia de Cameron cambió por completo en ese instante.
Se sorprendió ante lo dicho por el ojiazul.

—Asi que no se te ocurra volver a acercarte, ¿Ok? —Le dijo, y Cameron, sin más, derrotado, se fue y se perdió en la infinidad de los pasillos.

Yo me quedé estática en mi lugar, realmente no sabía cómo actuar, qué decir... ni qué pensar.

Louis. Louis me había salvado.

—G-gracias...—Le dije, limpiando con la manga de mi suéter el resto de lágrimas que había en mi rostro.

—No hay por qué...—Dijo, y lo que hizo a continuación jamás me lo hubiera esperado.

En un lento movimiento, se acercó hacia mí y me envolvió en sus brazos, dándome un fuerte y reconfortante abrazo. Sonreí en medio de este.

Yo no podía creer todo lo que estaba pasando.

De hecho, la sensación de estar entre sus brazos no se sentía tan mal como yo creía.