Vientre en renta- YM

44- Meses 4 y 5

4to mes

Las pequeñas manos sostenían fuertemente los dos lados de la tela en un intento desesperado por juntarlas pero tal parecía imposible. Cansado suspiró en una muestra de rendición. Oficialmente, no le cerraban ninguno de sus pantalones.

-Rayos- bufo frustrado y se sacó el par de jeans para aventarlos lejos. Haciendo un mohin salió de la habitación descalzo y vistiendo únicamente la camisa blanca de su esposo-¡Yoonie!- gritó en puchero y abrió la puerta de la oficina de su marido

-Oh, Jimin, ¿si quiera has visto la hora?- preguntó señalando su reloj- es muy temprano para provocarme de esta manera- dijo señalando las piernas desnudas de su chico

-No estoy intentando seducirte- se quejó y nuevamente  hizo un puchero

-¿Entonces a qué se debe esto?- cuestionó

-Ya no me cierran los pantalones- respondió haciendo una carita triste

-Pues entonces lava los que traías ayer y pontelos hasta que vayamos por otros

-Ya lo intenté, tampoco me quedan- arrastró los pies y se subió a las piernas de Yoongi que estaba sentado en el sofá de cuero

-Oh, bueno, entonces...tendremos que ir en seguida por unos- agregó riendo

-¿Y cómo esperas que salga?

-Debo tener un par de pantalones para ir por casa que te queden bien

-No, no quiero salir así- dio un pequeño golpecito sobre el pecho del mayor insatisfecho con aquella solución

-¿Entonces qué propones señor remilgon? ¿Que los compre en línea?- los ojos de Jimin se volvieron una línea y Yoongi lo supo- eres increíble. Bien, tu ganas, pero...

-Pero...

-Será más tarde, ahora quiero gozar de la vista- acarició los muslos de su esposo y ambos rieron

-Todo lo que quieras, cariño

*

5to mes

Un pequeño Jimin sorbía su bebida de pera mientras que aguarda en aquel estrecho vestidor. Dentro hacía mucho calor y  sólo deseaba un poco de aire acondicionado.

-¿Tae, vas a tardar mucho?- preguntó cuando su bebida se terminó- dijiste que iríamos a comer

Taehyung le había convencido de salir ya que el muchacho no había salido mucho últimamente, sin embargo no mencionó que parte de la salida consistía en pasar dos horas probandose ropa, o mejor dicho, esperar a que él se la midiera.

-Ya voy- la cortina se corrió y un delgado y atractivo chico salió vistiendo un elegante traje- ¿Y bien?

-Wow, te ves muy bien, bueno, todo se te ve bien, por algo eres modelo

-Gracias Jimin, bueno, si crees que se me ve así de bien entonces me lo llevaré puesto- llamó a la vendedora y dió su tarjeta de crédito- bueno, ahora sí vamos a comer- los ojos de Jimin se iluminaron, había estado aguardando con ansias. En casa Yoongi controlaba la mayoría de sus comidas y aunque se lo agradecía, realmente añoraba comer algo un tanto pecaminoso. Ambos subieron al auto del rubio y condujeron hasta llegar al restaurante  previamente reservado.