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Capítulo 4

Un baile entre Casas

1

Harry miró con risa mal disimulada junto a Tom el acicalamiento de Draco. La verdad le parecía raro saber que por un descuido averiguo el secreto del chico. Al no llamar a la puerta del baño compartido por los cuatro en al habitación fue testigo de como el rubio cambia su forma, el cabello rubio platinado a un suave castaño con ondas y perfectos buques. También los ojos plata a un verde oscuro. Pero cuando se miraron por el espejo los cabellos 'castaños' se volvió rojo y volvió al largo normal del chico.

-Potter, es que no te enseñaron a tocar antes de entrar.

-L-lo siento pero es que ocupaba algo.

-No dirás nada. Me oyes-amenazo Draco.

-N-no lo juro.

Pero la verdad es que en ese momento llegó Tom junto a Theo y así que los otros dos también se enteraron.

Pero en el presente, Draco bufaba diciendo que no era digno esto y aquello, su madre lo mataría y su padre mataría a todo aquel que lo supiera. Tom no tenía problemas era de la familia y lo sabía por las fotos. Theo también lo sabía porque el tenía memoria eidética y recordaba cunado Draco siendo más pequeño cambia a su antojo su color de pelo. Así que solo Harry estaba en desventaja. Y como Harry siendo Harry se escondía atrás de su primo Tom no quería sufrir la ira de Draco Malfoy que ahora su magia salia y destruía cosas a su pasos.

-Cálmate Dragón, sabes que nadie dirá nada. Yo por mi parte jamás diría algo o usaría para pedirte algo.

-A mi ni me mires, mi madre me mando fotos tuyas desde hace mucho, y nunca se me cruzo hacer algo. Además eres un Black no es nada de malo que seas un metaformago y tampoco me interesa mucho.
Draco suspiró y miró a Potter, el doncel negó varias veces y decía que no diría nada e incluso tampoco le haría saber a Luna que sabía el secreto si eso quería él.

-Bien.-Draco los miró, ellos serían sus compañeros de cuarto por el resto de su tiempo en el colegio. Además que ellos sabían podían ayudarle con lo que le pidió Brax.-Potter y Nott ustedes me pueden ayudar en algo.

-¿En qué?-preguntó Theo.

-Ocupo ver a Luna-susurró Draco.
Theo y Harry lo miraron pidiendo una explicación. Draco pensó que si Brax salía bien librado de esa fiesta le debería una muy grande. Tom imagino algo y sonrió ladino, totalmente Abraxas no había cambiado si era lo que pensaba.

-Iré a la fiesta de quinto año, la fiesta de las Casas por el quidditch.-empezó Draco contando la historia a sus compañeros de cuarto, un buen amigo de la infancia, un primo prodigo y a un doncel metiche que estaba en la ecuación.

-¿Y? Para que la ocupas, Draco.

-Theo, yo soy el que acompañara a Brax.

-¿Para eso te buscaba? -Harry se sorprendió, no podía creer que el chico rubio de ojos azules fuera tan malo
-Sí, Potter. Bueno... podrían llamar a Luna.

-Yo iré por ella, además si Nott o Harry van no saldrán de ahí por mucho. Además Luna es muy intuitiva si los ve pensara que no es nada malo pero si me ve a mi, sabrá que ocupas ayuda.

2

Luna Malfoy tenía un día tranquilo, sus compañeras no eran malas o mejor dicho no tenían porque ser malas con ella. Caminó en su alcoba y se sentó en su silla en el tocador. Arreglo sus cabellos platinados y sonrió, tocaron su puerta una niña de segundo la miró para decirle que tenía vistas.
-Pasa, hola Tom.

Crónicas de un doncelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora