Recuérdame: más que una historia de amor [BL]

41.- ¿Es normal sentir esto?

Duke había encontrado una fotografía que su otra personalidad mantenía oculta dentro de un libro. No podía creer lo que sus ojos miraban, era una imagen donde aparecía él y a su lado Garreth. El hecho de no recordar cuando se había tomado esa foto ya era desconcertante, pero lo era todavía más la expresión plasmada en su rostro y la manera en que lo abrazaba.

— Ese soy yo, pero... no parezco yo. Esa cara, ¿acaso me drogaron? —se preguntaba aturdido.

Se quedó inmóvil mirando la fotografía por más tiempo del que se dio cuenta, vio la fecha escrita hasta abajo, era una muy anterior, donde su estilo de cabello y el color de cabello de Garreth no coincidían con el orden de los sucesos.

Recuérdame...

Esa simple palabra escrita en ese pequeño trozo de papel hacía un interminable eco en su interior. Intentó recordar cómo había sucedido ese evento, pero por más que sus manos presionaron su cabeza no lo logró, trató con algo más reciente como es que fue que llegó a su casa el día anterior, también sin éxito alguno. En ese momento Duke se sintió realmente frustrado, cada vez se percataba más de esos espacios vacíos en su memoria, lo cual hacía decaer su ánimo. Le angustiaba pensar qué más cosas importantes había olvidado, no sabía qué hacer, volvió a mirar la fotografía, al menos alguien podría darle una explicación de aquel recuerdo plasmado en esa imagen.

Guardaba la foto dentro de su mochila cuando alguien tocó la puerta de su habitación, fue abrir creyendo que era su madre, pero fue Ari quién había llamado a su puerta. Ari conocía bastante bien a Duke, así que inmediatamente notó que algo lo inquietaba. Ari le preguntó si le sucedía algo, Duke confiaba en él, pero no estaba seguro si mencionarle lo que había encontrado o hacerlo después de que hubiera aclarado eso con Garreth. El pelirrojo le mencionó que le preocupaba no recordar cómo había vuelto a su casa el día anterior, Ari le dijo la verdad a medias, que él lo acompañó a su casa porque se había sentido mal de salud. Aun con la explicación de su primo, Duke no estaba tranquilo, pero fingió estarlo para no preocupar a Ari.

Ambos pasaron varias horas juntos en las que conversaron y jugaron un poco, hasta que Duke echó a Ari de su habitación para poder terminar sus deberes escolares. Ni el estudio que siempre lo absorbía alejó de su mente esos pensamientos que lo lastimaban.

— Mañana que lo vea le preguntaré...

Al día siguiente, Duke se encontraba entre querer hablar con Garreth y evitar a Karen lo más posible. Ambas acciones serían difíciles para el pelirrojo, pero la segunda lo sería aún más.

— En verdad te fuiste, ¿por qué te sentías mal? —preguntó Karen.

— Me enferma el pasar un día extra a la semana contigo —respondió evasivo.

— Eso no te salvará de nuestra platica pendiente.

Garreth llegó en el momento justo, evitando con su presencia que Karen siguiera incordiando al pelirrojo. La chica cambió de tema y entusiasta le pidió el móvil a Garreth, al tenerlo en sus manos le transfirió las fotografías que se habían hecho el fin de semana en el parque de atracciones.

— ¿Verdad que nos vemos lindos? —miró disimuladamente a Duke.

— Si —Garreth respondió breve.

— No le digas eso que luego se lo cree —mencionó Duke disgustado.

Para la chica fue evidente que logró lo que quería, con su comentario había fastidiado al pelirrojo, su expresión corporal delataba su enfado. En las horas posteriores, Duke intentó tener un momento a solas con Garreth para preguntarle sobre la fotografía, pero no le fue posible hacerlo. Cuando tuvieron un poco de tiempo libre, un profesor le pidió a Garreth que le ayudara a cargar un material pesado hacia otra aula, dejando solos a Karen y Duke.