Las vacaciones apenas habían empezado y ya habían pasado varias cosas. Karen se fue a vivir a otra ciudad, fue realmente triste verla partir, todo se volvió muy silencioso sin ella, de cierta forma la extrañaba, pero no podía admitirlo, al menos no frente a Duke. Tardé en entender que ella no le agradaba, además el comportamiento de Duke se volvió un poco extraño después del campamento.
Conseguí un empleo de medio tiempo en un supermercado, tenía la costumbre de trabajar en vacaciones, al principio porque mi madre me lo ordenaba, no le gustaba que estuviera de vago durante ese tiempo. Después porque así me mantenía ocupado, además ganaba algo de dinero que utilizaba en mis cosas, como mantener el color de mi cabello.
Aunque el dinero que gané con ese empleo no lo usé para mi cabello, estaba decidido a regresar a mi color natural para evitar problemas en el colegio. A Duke no le agradó la idea, parecía gustarle mucho mi cabello de color blanco, creo que era al único que le gustaba.
—Tu cabello natural es hermoso, pero amo que sea blanco —me dijo acariciando mi cabello.
—¿Amar?, no deberías usar una palabra así a la ligera —me sentí extraño cuando lo dijo.
—No lo hago. En verdad amo... tu cabello blanco —de nuevo esa extraña sensación.
Duke, el que siempre me mostraba una radiante sonrisa podía decir palabras como esas tan fácilmente, para mí era muy difícil decirle cuanto amaba su sonrisa, su cabello, sus ojos, hasta el mínimo detalle de él, quizá no lo hice porque no conocía el verdadero significado de esa palabra.
Dejó de acariciar mi cabello, para recargar su cabeza en mi hombro a la vez que tomó mi mano entrelazando sus dedos con los míos. Mirábamos juntos el atardecer, era de las cosas que más nos gustaban. Duke había dicho que no podíamos demostrar cuanto nos queríamos en público, entendí que era vergonzoso para dos chicos hacerlo, pero él no dejaba de acariciar mi rostro, tomar mi mano o estar tan cerca de mí, cuando había personas a nuestro alrededor.
Sus acciones me alteraban, como si acabara de bajar de una montaña rusa, trataba de mirar el paisaje para controlar lo nervioso que estaba. Era difícil tranquilizarme, podía sentir su mirada en mí, cuando éramos amigos no era consciente de su mirada. Él seguía siendo el mismo y yo también, entonces... ¿por qué me sentía tan diferente estando a su lado?
—¿Te divertiste en el campamento? —me preguntó.
—Si, pero ¿cómo sabes lo del campamento? —me desconcertó su pregunta.
—Bueno, es raro, pero comencé a dejarme notas "a mí mismo" para ver si mejoraba mi problema.
—Eso suena bien, ¿te ha ayudado?
—Me ha servido para darme cuenta de muchas cosas —tenía la impresión de que detrás de su tono serio había algo más —. Quiero que me contestes, ¿quién te gusta más? ¿él o yo?
Me dio la impresión de que estaba ansioso, podía verlo en su mirada, pero su pregunta no era fácil de responder.
—¿Estaría mal si digo que los dos? —noté como sus ojos se abrieron más y después soltó una risa.
—No deberías provocarme de esa forma.
Esa personalidad de Duke era despreocupaba, alegre y directa, su sonrisa tenía la capacidad de iluminar hasta la tormenta más oscura. Tenía la duda de si mi respuesta lo había molestado o no, Duke miró alrededor, me jaló efusivamente y me besó. El contacto de sus labios con los míos era mágico, los sonidos desaparecían, las imágenes y los olores también, solo podía escuchar el fuerte latido de mi corazón, la única imagen que mis ojos veían era su rostro muy cerca del mío, y su aroma me invadía por completo. Todos mis sentidos se llenaban de él, aunque el beso durara solo un instante, la calidez de sus labios me acompañaba cuando él ya se iba.
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Recuérdame: más que una historia de amor [BL]
Teen FictionSinopsis: Garreth es un chico solitario que no siente importarle a nadie. Su apariencia agresiva y su retraída forma de ser le causan problemas, al grado de tener ideas suicidas. Todo cambia cuando conoce a un chico de singular aspecto, Duke. Ambo...