¡Olvidé mi sombrilla! // Bnior// JJP

VI

Al salir, un compañero de trabajo me ofrece llevarme hasta la parada en su auto, debido al diluvio y el frío. Creo que esta vez me salvaré y no llegaré empapado a casa; sin embargo, mi ilusión desaparece en cuanto me siento en el asiento del copiloto y él intenta encender el auto, pero el motor hace un leve sonido y vuelve a apagarse.

Salimos del auto y él lo revisa, pero nada de lo que hace parece funcionar, otros compañeros de trabajo intentan ayudarle y ni aun así.

—De verdad lo siento, Park. Creo que llamaré a un mecánico —se disculpa y saca su celular para realizar la llamada.

—No te preocupes, espero que puedan repararte pronto el auto. Nos vemos mañana —me despido con una ligera reverencia y él hace lo mismo.

En cuanto salgo del parqueo, me doy cuenta de que la lluvia ha cesado, por eso aprovecho para encaminarme rápidamente a mi destino, por lo que en poco tiempo me detengo la acera, a la espera de que el semáforo cambie de color y poder cruzar la calle; sin embargo, comienzo a sentir una ligera llovizna, la cual no tarda en intensificarse.

Luego escucho algunas risas a mi espalda, y en cuanto me volteo, me doy cuenta de que es Jaebum junto a un chico con risa escandalosa, pero demasiado contagiosa.

Jaebum me observa de reojo e inmediatamente desvío mi atención de él y su amigo, aunque pronto los vuelvo a observar con sorpresa, al notar que era el chico atractivo quien lo estaba cubriendo con su sonrisa.

A pesar del frío, siento mis mejillas arder por la creciente ola de celos y enojo que me azota, lo que sé que es absurdo, porque él no es nada mío, pero de todas formas yo quiero pensar que lo es, a pesar de que solamente hemos cruzado algunas palabras, bastante tontas, por cierto.

Él vuelve a verme y no puedo evitar hacer mala cara, lo que obviamente él nota y levanta sus cejas con un poco de sorpresa, mientras codea a su amigo, quien también se voltea sin disimulo para verme y comienzan a murmurar entre ellos, algo que odio completamente. El simple hecho de pensar que le está diciendo lo tonto e inmaduro que soy, me hace sentir enfermo.

Cuando el semáforo cambia, rodea los hombros de su amigo y ambos caminan, al mismo tiempo, parece que su amigo le dice algo divertido porque él le sonríe.

Y me molesta, porque esa sonrisa no es para mí y su amigo o quien sea para él tiene la dicha de tenerlo así de cerca, hasta quisiera que me pasara cualquier cosa vergonzosa para que, aunque sea me sonría de forma burlesca como suele hacerlo.

—Vamos al cine, no tengo nada que hacer y hay una película que quiero ver —lo escucho decir.

—Es una buena idea —suena emocionado.

Me adelanto un poco, porque, aunque soy curioso, no quiero escuchar su conversación, me hace sentir más celoso, si eso es posible.

Escucho detrás de mí sus voces, pero comienzan a acercarse cada vez más a mí, y Jaebum pasa a mi lado, mientras choca con fuerza su hombro contra el mío, haciendo que pierda el equilibrio y esté a punto de caer. Logro estabilizarme nuevamente y lo observo con incredulidad.

¿Él enserio me había hecho algo como eso? ¿Qué diablos pasa por su cabeza? Tal vez no le agrado y desconocía ese detalle. Pensar que le disgusta mi presencia, me hace sentir más pequeño, como si mi corazón y mi cuerpo se encogiera al mismo tiempo.

Se voltea a verme con burla, pero permanezco serio y solo menciono un "Idiota", lo que sé que logra escuchar a la perfección porque su rostro se pone serio. Probablemente no elegí la mejor palabra y solamente intentaba ocultar el dolor que algo tan simple como su acción me causó.

Sin embargo, mi parte vengativa y orgullo me piden a gritos que la haga algo a él, aunque sea demasiado tonto de mi parte y probablemente con eso me deteste más.

Sigo caminando, pero esta vez con más rapidez y soy yo quien choca al propósito mi hombro contra el suyo, pero no me detengo ni me giro a verlo.

En cuanto llego a casa, pienso que me comporté ridículo e infantil, pero me da igual, aunque en el fondo siento una gran decepción por él y hace que mi corazón duela un poco.

Un par de horas después, mis tres amigos me visitan, pero parecen percatarse de mi estado de humor.

—Anda, Jinyoung. Tienes que animarte un poco —Jackson hace un berrinche, intentado llamar mi atención.

—No me fastidies, solamente quiero llorar —cubro mi rostro con ambas manos, pero siento que el sillón se hunde a mi lado izquierdo, mientras alguien rodea mis hombros.

—¿Te pasó algo malo hoy? —hasta Bambam parece preocupado.

—Vi a Jaebum con un chico.

—¿Y eso qué tiene? Nosotros algunas veces salimos juntos y eso no significa que seamos pareja —escucho la voz de Jackson.

Hago una pequeña abertura entre mis dedos para ver a mis amigos y me doy cuenta de que el último en hablar tiene el ceño fruncido.

—Buen punto —Mark solamente asiente.

—¿Qué pasaría si de verdad fuese su novio?

—Jinyoung, en serio estás siendo muy dramático y te estás haciendo un lío en la cabeza por algo tan tonto como eso, además te preocupas demasiado por alguien que no es nada tuyo —el más bajo hace cara de que en serio quiere darme una bofetada por tonto.

—¡Cállate! Ni siquiera te atrevas a repetir eso porque me hace sentir peor —suspiro.

Sé que tiene la razón absoluta, pero eso tampoco le da el derecho de pisotear mis esperanzas, aunque ahora casi que ni le hablo al chico, pero eso me gustaría muchísimo.

—Si es su novio no importa, puedes seguir intentando hablarle, de todos modos, es solamente tu amor platónico. En caso de que te den ganas de robárselo más adelante, lo haces y listo —el chico sentado a mi lado acaricia mi cabello —. No tendrías nada que perder, más bien mucho que ganar y ese chico con quien lo viste sería el único en perder.

—O puede que ni siquiera se sienta atraído por los hombres —el rubio añade con seriedad.

—¡Eso es todavía peor! —recuesto mi espalda en el sillón y muevo de arriba abajo mis pies por algunos segundos —. Si tan solo ustedes supieran lo difícil que es ser correspondido... Probablemente la mayoría de hombres en el mundo son hetero.

—De hecho, una vez descubrí que la chica que me gustaba tenía novia, entonces lo comprendo —Wang responde, mientras suspira ante el recuerdo.

—En caso de que sea su novio, creo que lo mejor es hasta dejar de mirarlo, para mí alguien que tiene pareja se vuelve feo y es prohibido. Si no es su novio, también dejaré de observarlo para evitar crearme más falsas ilusiones con alguien que posiblemente jamás me corresponderá

Sí, seguramente esta es una de las cosas más difíciles de que no te gusten las chicas, porque obviamente no siempre serás correspondido por otro hombro, aunque te guste muchísimo. Si ya es difícil que a una persona heterosexual le correspondan, a una homosexual lo es todavía más, por eso no he salido con nadie en varios años.