Narra Max.
- ¿Te importa? Tengo algo que hacer - dije saliendo de mi casa y cerrando la puerta, mi tío no dejaba de apuntarme con él arma.
- ... Si no te mato ahora, seguirás causando dolor... - quito el seguro de la pisto.
- ... - agarre la pistola y se disparo, por suerte no estuve en el destino de la bala que termino en mi puerta.
Golpee la cara de mi tío haciéndolo caer, el arma estaba en mi mano.
- Valla... una gran arma... gracias - la escondí entre las prendas que vestía y me alejaba del lugar, me detuve en seco para que la mitad de mi cuerpo girara - ... Han pasado 8 años y sigues siendo un viejo decrepito que no sabe luchar... das pena anciano - seguí mi rumbo con dirección a encontrarme con Luis y Jack.
Estaba caminando algo apresurado, tenía el ceño fruncido.
- Estos idiotas... me las pagaran muy feo... - solté una risa y me detuve, mire a un niño que estaba en su jardín con su gato en brazos.
Lo mire unos segundos como si fuera un desquiciado total, sus ojos empezaron a cristalícese y empezó a llorar como un bebé. Me fui del lugar soltando un carcajada.
- Hoy estoy de malas... - dije para mi mismo y apresurar un poco el paso.
Camine por mucho tiempo, al llegar a la playa había muchas gente por todos lados.
Los busque por la playa hasta que vi un anuncio, era el anuncio de un nuevo parque de atracciones.
- ... Algo me dice que los encontrare ahí... - camine hasta el lugar que indicaba el anuncio.
Cuando llegue mire la entrada algo aburrido, definitivamente hoy sería un día largo y pesado.
Busque por todos lados, fui a la montaña rusa, al zamba y a los carritos chocones pero nada.
Estaba caminando en dirección a una nueva atracción hasta que pare en seco.
- ... - estaba sonriendo con el seño fruncido mirando al frente, emanaba un aura que hacia que las personas me miraran con miedo y se apartaran un poco al cruzar por mi lado - ... Seré estúpido, al idiota no le gustan este tipo de juegos... A ver piensa como un marica... - cerré mis ojos, con una mano sostuve mi mentón y con la otras la apoye en mi cintura, abrí los ojos como si con eso supiera la respuesta y así fue.
Frente a mi había una atracción en particular, una a la que sabía que en ese lugar encontraría a Luis.
Las tazas giratorias.
Camine a paso rápido, la gente que estaba al frente de mi se aparto cuando vieron que llevaba prisa y no estaba para detenerme aun que pase un tren frente a mi.
Cuando llegue mire a todas las tazas pero no había rastros de él.
- Tenía unos hermosos ojos verdes, te lo puedo jurar... - ¿Ojos verdes? - ... algo me dice que nos volveremos a encontrar -.
Me di la vuelta encontrándome con un chico y una chica.
Tenían el mismo cabello y ojos negros, al parecer son hermanos.
- Hay eres un idiota, ¿Por que no le tomaste foto o al menos le hablaste? - le dijo la chica.
- Oye tu... - ambos me miraron - Al chico que viste ¿Tenias el cabello café y se subió a las tazas giratorias? -.
- ¿No te dijeron que escuchar conversaciones de los demás es de mala educación? - tome bruscamente el cuello de su remera, la gente que estaba cerca nos miraba.