Narra Luck.
FlashBack.
Iba saltando la soga con las chicas, la verdad ellas no sabían que era chico, mi voz era un poco más aguda de lo que quería y mi madre me vestía como a una niña.
Mi cabello era un poco largo, me llegaba hasta por debajo de los hombros, estaba suelto, solo unos cuantos cabellos estaban sujetos en una coleta.
- 15... 16... 17... 18... 19... - canturreaban mientras saltaba hasta que en el 22 me tropecé. El timbre sonó y todos los que estaba en el pateo corrieron hasta llegar al salón.
Iba a mi salón hasta que vi a un chico entrar por la puerta, tenia el ceño levemente fruncido, llego junto con su madre.
Tenía el cabello rubio, algo largo, sus ojos eran celestes y era un poco más grande que yo.
Me tropecé y caí al suelo por estarlo mirando tan detalladamente, la secretaria que atendió a la madre y al chico me llamo la atención para que valla de una vez a mis clases.
Tenía 12 años. Me fui corriendo a mi clase.
Unos 2 días después siempre veía a las chicas murmurar. Mis amigas me veían raro por que nunca hablaba de chicos como ellas y es que a mi me gustaban las chicas.
Cami, mi amiga de cabellos marrones oscuros, se acerco junto con María, que tenia cabellos cafés claros y ojos verdes.
- Lu ¿Realmente no te gustan los chicos? - me pregunto Cami, yo solo negué con la cabeza.
- Déjala, así nos quedamos con todos - se burlo María - hablando de chicos ¿Ya vieron al chico nuevo? -.
- Si, es tan lindo, ¿Esta en tu curso, no? - María era 3 curso más que el de nosotros, nos habla por que Cami es su prima.
- Si, es algo callado, Jack, ese raro feo, le empezó a hablar -.
- Uhgg... que mal... espero que no se vuelvan amigos, ese chico es raro, no habla con nadie -.
- La otra vez trate de hablar con él y hablamos sobre por que siempre se cubría el ojos, ese tonto me empezó a ignorar, es un estúpido -.
Me levante y me aleje de ellas, a veces me molestaba que hablaran así de las persona, fui al patio para ver si podría jugar con alguien a algo pero no había nadie.
- Hola... - escuche una voz detrás de mi y me volteé, me encontré con ese chico del que tanto hablaban todas.
- ... Mmm... Ho-Hola... - dije mientras agachaba la mirada, mi madre dijo que nunca me quedara a solas con ningún chico por que ellos siempre abusaban de la situación.
- ¿Que pasa?... ¿Me tienes miedo? - empezó a acercarse y yo me aleje un poco.
- P-Por favor... m-me dejas pasar - eleve la vista, tenía miedo.
- No... eres linda... -.
- Gracias... - me sonroje, no se porque.
- ¿Tienes novio? - eso me hizo encender, estaba muy rojo.
- N-No -.
- Que bueno - sonrió de lado, era lindo, pero se supone que deberían gustarme las chicas - ¿Como te llamas? -.
- ... Lu - siempre quise decir mi nombre de verdad, pero mamá se pondría triste, ella siempre quiso una niña y ahora no podía tenerla ya que se separo de mi padre - ¿Y tu? -.
- ... Max... -.
Empezamos a hablar hasta que termino el recreo, algunas chicas me miraban envidiosas.
Los días pasaban y la mayoría de las chicas ya no me saludaban ni nada, María y Cami dejaron de hablarme. Todo eso por que comencé a hablar con Max.
Ahora estábamos en la casa de Jack que no despegaba sus ojos de su libro, estábamos en su habitación, yo sentado en el borde de la cama y el pelinegro sentado en el suelo apoyando su espalda en su cama.
Me incline un poco para ver que leía y parecían comics, había un chico besando a otro, me puse rojo de inmediato.
¿Como podría ver eso con una expresión seria en su rostro?.
Escuchamos a Max entrar por la puerta y ambos volteamos a mirarlo. Tenía la mejilla roja.
- Te tardaste demasiado - dijo Jack.
- Mi madrastra jodia demasiado -.
- Se nota... - Jack volvió su vista a su libro, yo me levante y me pare frente a Max.
- ¿Estas bien? - me pare de puntitas y toque su rostro en la parte dañada.
- Tuve golpes peores - miro a Jack quien tenia su vista aun en su libro.
Después de un rato, Max y yo salimos al patio trasero, el pelinegro seguía en su cuarto, ¿No podía dejar de ver esas cosas para salir al aire libre?.
Sentí como los brazos del rubio me abrazaban fuertemente y sus labios se posaron sobre los míos.
Cerré los ojos lo mas fuerte que pude, trate de apartarlo pero tenia más fuerza que yo.
Luego de unos minutos se separo de mi, mi respiración estaba agitada, ese era mi primer beso, tenía ilusiones de que sería el más especial y sería con una chica.
- M-Max... - trato de volver a besarme pero gire mi cabeza haciendo que besara mis mejillas, su labios pasaron a mi cuello mientras sus manos empezaban a subir por mi vestido celeste - es-espera... Max... -.
Me beso nuevamente, mis manos trataron de apartarlo, pero era muy débil. Cuando se separo de mi para tomar aire aproveche para decirle...
- Soy hombre... - mis ojos estaban cerrados y mis manos sujetaban fuertemente su camisa azul, tenía ganas de llorar, ahora lo perderé a él también, no tendré amigos.
Me alzo, me metió dentro de la casa para luego entrar al cuarto de huéspedes que estaba en el primer piso.
Levanto mi vestido y empezó a besarme el cuerpo, la tira que sujetaba mi cabello para que no se me venga a la cara se calló en el camino. Esto realmente me confundía ¿No debería de darle asco besar a un chico? Mi madre dijo que nunca le dijera a nadie que realmente soy varón o les daría asco por vestirme como niña.
- M-Max... espera... no... - volvió a besarme desesperado mientras desvestía ambos cuerpos.
Me puse muy nervioso empezó a frotar mi pene, empecé a emitir sonidos un poco raros, jamás había estado así.
Besaba mi cuerpo, me dio la vuelta poniéndome de cuatro y beso mi espalda, se sentía bien, me sentí querido, no le importaba si era hombre.
Sentí algo entrar en mi, grite pero la mano de Max tapo mi boca y lamio mi oreja.
- Ssshhhh... no digas o hagas algo - susurro para luego moverse, dolía mucho, trataba de aguantar.
El dolor empezó a desaparecer, ahora se sentía mucho mejor, destapo mi boca, en la habitación solo se escuchaban nuestras respiraciones agitadas y esos ruidos raros ahora ya nuevos para mi.
- T... Te... ah~ - lo escuche decir, mire a un lado ahí estaba un espejo donde nos reflejábamos, mis mejillas estaban tan rojas.
Max tenia los ojos cerrados mientras me agarraba de la cadera y se movía. Apoyo su frente sobre mi espalda.
- T-Te... amo... ah~ - sentí un liquido dentro de mi, sabía lo que era. Yo también solté el mismo liquido manchando las sabanas.
Ambos caímos en la cama, estábamos tan cansados, Max salió de mi para pararse e ir al baño.
Yo aun estaba echado, mi respiración estaba calmándose de a poco, puse mi mano en mi pecho y sentí los golpes que daba mi corazón.
Fin de FlashBack.
Ese recuerdo permanece en mi mente, siempre que pensaba en Max llegaba ese recuerdo.
Lo único que quería era deshacerme de ese recuerdo, porque ahora, Max ya no siente lo mismo, no desde que llego ese Luis.
Lo odio, la primera persona que odio.
Me enamore de Max, pero a él supongo que ya no le gusto, solo por ese chico. Quiero estar a lado de mi rubio pero él quiere a otro.
Siempre es feliz cuando le hacen caso, así que hago lo que quiere para que este feliz, Jack siempre me dijo que no valía la pena pero es mi vida no suya.
Si yo quiero estar con él, estaré con él, a Jack que le importa.
Ahora me arrepiento de a verlo llevado con Luis, pero si quiero que me quiera tengo que hacer lo que el quiere... ¿No?.
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Narra Marcos.
Estaba caminando por el parque, hoy era mi día libre y no tenia con quien pasarlo, me sente en una banca del parque.
