Capitulo 24

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Ariana

— Eres una zorra — escuche decir a una voz irritante y chillona.

— ¿Disculpa? — voltee a mirar a la chica que decir esa cosa tan cierta.

Pero tampoco es para que me lo recuerden.

— Ósea ¿a que juegas mojigata? — rió con amargura — no permitiré que juegues con Iván, no se lo merece — reí con sarcasmo.

— Ah ya entiendo, te gusta Ivan — ella tenso su cuerpo — mi amor — me zafe del agarre de Blake y me posicioné en frente de ella — estas celosa ¿de mi? — solté un risotada — no tengo nada con pastelito, ni con el — señale a Blake — así que a mi no me vengas a amenazar mosca muerta — rodé los ojos y camine en sentido contrario a ella.

***

Ya eran las 8 de la noche, mi sistema todavía estaba activo, a si que dormir no era un opción, estaba en mi cama mirando fotografías de mi celular cuando la vi. Era una foto del año donde ocurrió la desgracia, ese día nos habíamos escapado los dos solos, mama me había castigado por un travesura, pero Dereck me saco para distraerme — sonreí al recordarlo — estaba sin zapatos porque como me escape tan rápido que los olvidé, por eso Dereck ese día me cargó todo el camino.

No era muy lejos, era un bosque no muy apartado de la cuidad. Salimos en la mañana y llegamos al bosque cerca de las 4:30 de la tarde.

Pero lo valió, está foto la tomo Alex un amigo de Dereck que nos vio en la carretera y la tomo, porque ni Dereck ni yo llevábamos celulares. Estábamos desconectados del mundo.

— El mejor día — sonreí con nostalgia, una solo una lágrima se desliso por mi mejilla, eso basto para darme cuenta que la herida echa hace dos años, todavía no había cicatrizado, seguía abierta en carne viva, y cada vez que tocabas ahí, dolía y mucho

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— El mejor día — sonreí con nostalgia, una solo una lágrima se desliso por mi mejilla, eso basto para darme cuenta que la herida echa hace dos años, todavía no había cicatrizado, seguía abierta en carne viva, y cada vez que tocabas ahí, dolía y mucho.

Iba pasando mis fotos cuando encontré otra, otra cuchilla al corazón y un poco de alcohol para que mi herida arda más.

Iba pasando mis fotos cuando encontré otra, otra cuchilla al corazón y un poco de alcohol para que mi herida arda más

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Mierda como dolía. Esa foto... Ese día habíamos ido de campamento con toda la familia, era gracioso porque lo obligue a tomarse esa foto, pero sin embargo el sale mejor que yo. Mamá tomo esa foto, yo la obligue también a que la tomara, pero no me arrepiento de nada, es una de las pocas fotos que tengo con el.

Guerra de GemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora