CAPITULO 34

39 2 0
                                    

PDV. HARRY

Anoche no paré de llamar a Louis, pero no obtuve respuesta alguna.

Me enfurecía que prefiriese creer al subnormal ese antes que a mí.

Me pasé toda la mañana en la galería trabajando, ya que tenía dos pedidos para este mes más el del niño rico.

En dos días era mi cumpleaños, y todavía no sabía si ir a pasarlo con mis abuelos o celebrarlo con Louis. Claro, que tal como estaban las cosas a lo mejor no quería ni verme.

Suspiré, dejando la brocha en el caballete. No podía concentrarme en esta situación.

Necesitaba hablar con él.

- ¿Qué te ocurre?- preguntó Mark, mi compañero.

- He discutido con mi chico.

- Vaya, ¿Qué ha pasado?

- Que tengo que aprender a controlarme- dije, sentándome en la silla.

- ¿Has hablado con él?

- No me coge el teléfono.

- Pues ve a su casa.

- No me abrirá la puerta.

- Pues insiste- respondió, encogiéndose de hombros- en algún momento hablará contigo.

- Posiblemente me pase a lo largo del día. Ahora estará en la universidad.

- Mañana me cuentas- dijo, despidiéndose y saliendo del estudio.

Me encaminé al lavabo, necesitaba mojarme un poco la cara para espabilarme y seguir con el trabajo.

PDV. LOUIS

- No me puedo creer que el cabeza garbanzo me haya puesto un 7. Esto es indignante- dijo Rachel, lanzando su trabajo en la mesa, refunfuñando.

- Si te sirve de consuelo yo he sacado un 4. Mi madre va a matarme- respondió Robert, sacando su comida.

- Si no te pasaras el día metido en mi casa no pasarían estas cosas- dije, mirándole.

- Oye perdona, voy de vez en cuando- se defendió, dando un bocado a su sándwich.

- En esta semana has estado cuatro veces, y estamos a viernes.

Robert me miró mal, ignorándome. Reí, empezando a comer.

***

Me pasé toda la tarde estudiando, ya que el lunes teníamos un examen muy importante de empresariales.

Dejé los libros en el escritorio, levantándome y bajando al salón, sentándome en el sofá junto a mi hermana.

- ¿Ya terminaste?

- Por hoy sí. Estoy hasta las narices de tanto número y palabras raras.

Mi hermana carcajeó, cambiando de canal.

- ¿Has hablado con él?- preguntó, mirándome.

Negué con la cabeza, a lo que mi hermana asintió, dirigiendo su vista de nuevo hacia el televisor.

Encendí mi móvil, mirando el registro de llamadas. La última que recibí de Harry fue esta mañana a las 8, la cual mandé al buzón. No se si hacía bien, pero lo que sí sabía es que no iba a perdonarle todo, por mucho que le quisiese.

El timbre sonó, y me negué a levantarme, obligando a mi hermana a abrir, la cual rodó los ojos. Estaba demasiado a gusto como para moverme.

- Harry, ¿Cómo estas?- preguntó mi hermana.

El arte de amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora