La Purga.

-17-

"Ayuda inesperada".

Abrí mis ojos lentamente con un poco más de energías de las que tenía antes, voltee a mirar a mi alrededor encontrándome con una maquina conectada a mi brazo al igual que había una venda en mi estomago el cual no me dolía nada, raro. Voltee a ver a mi izquierda y vi a una mujer acostada en otra camilla mirando para el techo, ella tenia varias heridas en el brazo hechas por cuchillos, al quedarme examinándola, vi que su perfil me resultaba muy familiar, demasiado.

- ¿Ana? - Le pregunte para llamar su atención, la mujer volteo su cabeza lentamente para mirarme y dándome la sorpresa de que si era ella.

- ______... ¿Qué haces aquí? ¿Qué te paso? - Me pregunto preocupada al ver que estaba conectada.

- Tuve una pequeña herida en un evento de la purga.

- ¿Fuiste con el chico de ojos verdes?

- Así es, resulto ser una trampa y pues, ya vez que no todos salimos bien. - Sonreí de lado por mi mal chiste. - ¿Qué te paso a ti?

- Me encontraba aquí cuando llego esa gente a atacar al clan, fui una de las pocas sobrevivientes. Lamento que se hallan llevado a tu madre.

- No te preocupes, pronto iré por ella.

- ¿En ese estado? Nada de eso. - Dijo mirándome preocupada.

- Ya estoy mucho mejor, tu tranquila. - Sonreí para que se fuera un poco su preocupación, a decir verdad, me encontraba un poco mejor, no como para correr cinco manzanas, pero estaba mucho mejor que antes.

- Ya despertaste. - Dijo Luke llegando a mi camilla.

- Así que sigues con él... - Dijo Ana sonriendo picara y levantando las cejas varias veces, yo solo ríe. Luke se giro para mirar a Ana ya que este se encontraba en la mitad de las dos.

- Oh, Hola. - Dijo sonriendole. - Wow, ¿Qué te paso? - Dijo borrando su sonrisa y mirándola preocupado.

- La depuración... lo de siempre. - Dijo para no darle mucha importancia a la pregunta.

- ¿Cuánto tiempo llevo conectada? - Le dije a Luke para llamar su atención.

- Tres horas, por eso vine. Michael dijo que seguro ya estabas despierta y mejor. A demás de que tenemos algo que queremos preguntarte.

- ¿No me puedes preguntar ya? - Dije obvia.

- No. - Dijo en un tono un poco enojado para después irse, ¿Qué le pasa?. En eso llego el chico que me atendió, vi como empezaba  a desconectar los cables y apagar la maquina, supongo que pronto me podre ir.

Una vez desconecto todo y me mantuve un tiempo recostada para que todo volviera a la normalidad, me levante dispuesta a ir a la oficina de Michael, mi acción hizo que Ana se sentara en la camilla.

- ¿Necesitan ayuda? - Me pregunto con una sonrisa.

- Oh no, tu no vas a salir de acá.

- No eres mi madre. - Dijo aun con su sonrisa y levantándose dejándome ahí parada con la boca abierta. Sacudí mi cabeza para quitar esa idea de que ella iba a ir, seguro solo esta jugando. Con cuidado me dirigí a la oficina de Mike, golpee tres veces la puerta y en unos pocos segundo me abrieron, a lo que yo entre en esta.

- Me alegra que estés mejor. - Dijo Michael acercándose a mi para darme un beso en la frente. - Bueno, seguro el estirado te dijo que queríamos hablarte sobre algo.