Out Of The Woods - Remus Lupin

27. Renuncia

¡Vete, no comprendes que te estoy salvando!
¡No comprendes que te estoy amando!
No me sigas, ni me llames, ni me beses
Ni me llores, ni me quieras mas

Fuimos - Adriana Varela

Se sorprendió al levantarse de un sobresalto en uno de los sillones del despacho de su director.

Contempló durante unos momentos a su alrededor con los ojos aún entrecerrados pero los recuerdos de anoche le vinieron a su mente haciéndola incorporar de un salto.

-Remus...

Estaba decidida a ir a buscarlo cuando vio a su director observarla desde una esquina ataviado en su túnica gris.

-El profesor Lupin se encuentra bien, señorita Lowe –le habló tranquilamente pero sin quitarle un ojo de encima.

Ella asintió y tragó saliva en silencio.

-Si no fuese porque los acontecimientos de anoche permanecen en secreto, le daría el premio especial por servicios al colegio. Anoche su actuación fue heroica señorita Lowe, muy valiente de su parte –honestamente no estaba para reconocimientos ni menciones, lo único que quería era saber como y donde estaba Remus, y luego que había sucedido con Sirius –El profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras se encuentra en sus aposentos, reponiéndose de anoche. Me pidió expresamente que no lo busquel –él enarcó una ceja mientras ella evitaba abrir la boca de sorpresa –Sirius Black por otro lado, ha escapado exitosamente, supongo que al menos eso debe alegrarla un poco...

Ya no se preguntaba como hacía aquel señor para saberlo todo, pero no dejaba de sorprenderse.

-Estuve hablando con Remus y me contó, evitando cuestiones innecesarias, su estrecha amistad –Annie se sorprendió de la tranquilidad con la cual hablaba Dumbledore –naturalmente no hubiese permitido una relación de esta índole en Hogwarts, menos siendo amigo personal de su padre señorita Lowe, pero lo comprendo.

-¿Usted... lo entiende?

-El amor funciona de manera mágica y extraña, si me permite decirle, pero mas allá de eso, usted y el señor Lupin no tenían demasiadas alternativas, él es un hombre lobo y usted tiene la marca de la luna, claramente por él.

Ella asintió en silencio recordando las extrañas palabras de la profesora Trelawney, que en ese momento le parecieron sin sentido pero ahora le estaba claro como el agua.

-¿Y Pettigrew? ¿Logró escapar? –dijo recordándolo todo de repente, él asintió –entonces....

-Si señorita Lowe, él volverá y no se tardará demasiado –un escalofrío de terror le recorrió la espalda –como es lógico, intentará buscarlo a Harry por cielo y tierra, pero supongo que al menos Hogwarts tiene una valiente leona entre los bosques para cuidar de sus estudiantes –sonrió y él le guiñó un ojo –ahora si me permite señorita Lowe, debo contestar unas lechuzas del ministerio. Tener que mentir por Sirius es lo menos que debería hacer...

-¿Nadie sabe la verdad?

-Harry ahora lo sabe, y eso es importante –dijo Dumbledore volteándose a recoger unos sobres.

-Gracias profesor, que tenga un buen día –se despidió ella bajando las escaleras desganada.

Pensó en Harry, y lo triste que sería estar en su lugar. Pero al menos había encontrado a parte de su familia.

Entendió las palabras de su director, Remus quería estar solo debía estar aún recuperándose y lo entendía. No quería avasallarlo aún con preguntas de lo que había sucedido en la casa de los gritos.