Trust - Justin Bieber

Capítulo 16

"¿No te arriesgarías conmigo?"

Carrie's Point of View.

Mojé mi rostro con agua para despejarme y poder empezar el día de la mejor forma, aunque lo dudaba porque sentía que mi cuerpo necesitaba más horas en la cama durmiendo. Estaba cansada y dormir con Justin no ayudaba porque siempre terminábamos haciendo de todo, menos dormir.

─ ¿Por qué no te duermes? –Abrí los ojos frustrada, girándome en aquella cama al escuchar cómo Justin se reía por un vídeo que veía en su portátil.

─ ¿Por qué no te duermes? –Repitió imitándome con mi tono de voz, sin mirarme.

Enarqué una ceja sin pizca de gracia y golpeé su brazo. – Deja de hacer eso o...

─ ¿O qué? –Me miró divertido─. ¿Vas a enfadarte conmigo, Tía Carrie?

─ No me llames así. –Me quejé.

─ ¿Por qué, Gatita? –Preguntó volviendo a prestar atención al vídeo que tenía puesto.

─ Porque no... ─Desvié mis ojos hacia lo que estaba viendo─ ¿Qué es eso?

─ Un programa de humor que veo. –Dijo sin mirarme.

─ ¿No tienes otra hora mejor que... ─Miré la hora que marcaba el reloj de mi teléfono─ la una de la mañana?

─ Uhm... Antes estuvimos ocupados, así que no... ─Me dedicó una sonrisa.

─ Vale, entonces me iré a mi habitación. –Me incorporé sobre la cama para salir de allí─. No sé cómo aguantas a tu dueño. –Miré a Esther que estaba atenta a nuestra conversación en los pies de la cama.

─ Fácil, porque me adora.

Puse mis ojos en blanco. – Uhm, yo no estaría tan segura.

─ No te vayas a ningún lado, Gatita. –Apagó el portátil y se giró para mirarme cuando lo dejó sobre la mesita.

─ Menos mal, podré dormir sin tener que oír ningún ruido. –Sonreí victoriosa─. Buenas noches, Tío Justin. –Repetí con ímpetu y su cara cambió a una expresión más seria.

─ ¿A mí sí me puedes llamar así? –Su brazo me rodeó por la cintura y me atrajo hacia él.

Asentí. – Yo mando, Bieber. –Le dije fijándome en sus ojos.

─ ¿Qué dirían tus sobrinos si nos vieran juntos, Tía Carrie? –Murmuró, acercándose a mí, hasta que pegó sus labios sobre mi mejilla dejando un beso en ella.

─ Nada porque no van a vernos juntos. –Dije situando mis manos en sus hombros cuando descendió hacia mi cuello.

─ ¿Por qué no? –Mordisqueó el punto más sensible de mi piel y atrapé mi labio inferior con mis dientes.

─ Porque lo primero que harían sería decírselo a mis hermanos. –Murmuré.

─ ¿Te da miedo que lo sepan? A mí no. –Confesó levantando su mirada y humedeció sus labios con su lengua.

─ Uhm, simplemente quiero mi espacio y no quiero que se metan en mi vida, juguetito. –Sonreí dejando un beso en sus labios.

Adormecida aún bajé hasta mi habitación y me vestí con unos pantalones negros, jersey blanco y botas para combatir el frío que seguro hacía en las calles de New York. Esther había venido en todo momento conmigo aprovechando que Justin no estaba porque se fue a seguir con sus promociones.