Capítulo 24

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"No estoy ilusionada."

25 de diciembre, 2015.

Bostecé frente a la pantalla del ordenador cuando terminé el último informe en la fundación, habían pasado varios días desde que volví de Los Ángeles y la vuelta a la rutina me costó más de lo que pensaba.

No dejaba de pensar en lo bien que lo había pasado en compañía de Justin, el último día fuimos a comer juntos y cada minuto a su lado me hacía sentir diferente; no recordaba esa sensación desde hacía tiempo y él estaba consiguiendo que me olvidara de todo lo malo que había en mi vida.

Me levanté con un archivador para colocarlo en la estantería que había en la pared y resoplé mirando el reloj de mi muñeca. Hoy teníamos comida de Navidad en casa de mis padres y por una parte, estaba contenta porque estaríamos toda la familia y amigos juntos. Pero por otro lado, solo quería irme a dormir y olvidar las fechas tan señaladas en las que estábamos.

─ ¿Tenemos que venir aquí para poder ver a nuestra hermanita? –Mi hermano Rich entró a la oficina y le miré con la ceja alzada, sorprendida por encontrármelo aquí. Tras él, apareció Carl con una sonrisa.

─ Rich he estado ocupada con la fundación y no tuve tiempo de ir a haceros una visita, no os enfadéis. –Rodé los ojos.

─ Bueno, me sorprende que te lo estés tomando en serio. –Sonrió.

─ ¡Por supuesto que sí, soy una persona seria y trabajadora! –Le reclamé yendo hacia él para darle un abrazo y un beso en la mejilla─ ¿Cómo has estado? ¿Qué le pasa a Alaina? No ha venido hoy a la fundación. –Le miré con una mueca en los labios.

─ Está con Laura, quiso ayudarla porque fue hace días al médico y no se encontraba bien. –Intervino Carl enseguida.

─ ¿Ah, sí? ¿Le pasa algo a Laura? –Dirigí la mirada a mi hermano mayor con preocupación.

Carl negó mirando a Rich. – Una revisión, nada más.

─ Bueno no cantes victoria Carl, porque todavía nos sorprendes ampliando aún más la familia. –Rich sonrió dándole un codazo.

─ El que tiene que hacer eso eres tú, Amani está muy sola y necesita un hermanito. –Intervine y abracé a Carl con fuerza, sintiendo cómo me levantaba del suelo.

─ No hay cosa que más desee ahora mismo que darle un hermanito a Amani. Créeme. –Sonrió sentándose sobre el escritorio.

─ ¿Qué hacéis aquí y no en la Iglesia? –Cambié de tema cruzándome de brazos junto a Carl, quién me rodeó por los hombros.

Rich curvó sus labios hacia abajo. – Queremos saber de ti, que viniste de Los Ángeles y no nos has contado cómo te fue el viaje con Elsa. –Habló mirando el lapicero que había sobre el escritorio y cogió varios bolígrafos.

─ Nos fue bien. –Sonreí─ Se nos hicieron muy cortos los tres días.

─ Imagino, Carrie. –Se levantó de allí y rodeó la mesa para sentarse en la silla que minutos antes estuve ocupando─. ¿Desde cuándo Elsa se llama Justin Bieber?

Carl soltó una carcajada y les miré reírse. Mi hermano se fue junto a Rich y se apoyó sobre el respaldo de la silla con sus codos.

─ Hemos visto todo, Carrie. –Volvió a decir.

Apreté mis labios hasta que formé una fina línea en ellos, sin saber qué decir. No quería más interrogatorios, no quería que volvieran a meterse en mi vida de nuevo. Sobre todo porque no pasaba nada entre nosotros. Éramos amigos, con derecho, pero no dejábamos de ser dos personas que se llevaban bien.

Trust - Justin BieberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora