Capítulo 39

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"Feliz cumpleaños, Juguetito"

1 de marzo, 2016.

Sonreí emocionada cuando cogí la bandeja del desayuno para llevarla hasta mi habitación. Me había levantado más temprano de lo normal para tenerlo todo listo antes de que Justin se despertara. Le había preparado tortitas con sirope de vainilla y un café. No era un desayuno excepcional pero quise tener el detalle en su día y consentirlo antes de irme a la fundación.

Dejé la bandeja sobre la mesita y me senté en el borde de la cama, Justin estaba tan profundamente dormido que ni siquiera se había dado cuenta de que yo no estaba a su lado.

─ Justin, despierta. –Susurré a su oído en voz baja.

Lo zarandeé un poco y cuando abrió los ojos aturdido, me miró esbozando una amplia sonrisa.

─ Buenos días, Gatita. –Su voz salió ronca. Al cabo de unos segundos, Justin frotó sus ojos a la vez que un bostezo se escapaba de sus labios.

─ Feliz cumpleaños, Juguetito. –Sonreí, abrazándole con entusiasmo mientras dejaba caer todo mi peso sobre su cuerpo.

─ Hmm, créeme que me gustaría que mi cumpleaños fuese todos los días si sé que vas a despertarme de esta manera. –Acarició la zona baja de mi espalda con sus manos.

─ No te acostumbres a estos despertares. –Le miré, mordiendo mi labio inferior─ Te hice el desayuno. –Me incorporé viendo la mesita.

Cogí la bandeja del desayuno y se la puse sobre sus piernas. Justin no dejaba de verla sorprendido por lo que había hecho.

─ Cariño, pero... ¿de verdad me has hecho tú el desayuno? –Enarcó su ceja en mi dirección.

─ Claro que sí, ¿quién iba a ser sino? ¿Ves a alguien más por aquí?

Me levanté de allí y caminé hacia el otro lado de la cama, sentándome el lado que estaba libre para acompañarle mientras desayunaba.

─ Espero que te guste. –Contesté mirándole con una sonrisa.

─ ¿Tú no vas a tomar nada? –Preguntó extrañado cuando dejó la taza de café sobre la bandeja después de darle un trago.

─ Ya he desayunado. –Indiqué. Fue inevitable contenerme mientras le preparaba el suyo porque mi estómago gritaba que necesitaba urgentemente ingerir comida─ Así que ahora come tú. –Sonreí, humedeciendo mis labios.

─ ¿Te vas a trabajar? –Me miró de reojo.

─ Sí, tengo una reunión con Alaina y debo irme antes de que sea más tarde. –Miré el reloj de mi muñeca.

Inevitablemente, no podía apartar la mirada de él cómo tampoco podía dejar de pensar en el regalo que le acabé comprando en 5th Avenue y que esperaba que le hiciera tanta ilusión cómo me hizo a mí. Se lo daría esta noche después de la cena con toda su familia y mi cuerpo no podía contenerse de la emoción.

Hacía tiempo que no estaba tan inquieta por ver la reacción de alguien que me importaba tanto cuando abriera su regalo.

─ Está delicioso. –Justin saboreó las tortitas que le había cocinado y tragó el pedazo que se llevó a su boca─ ¿Por qué no sabía que cocinabas tan bien?

─ Una siempre tiene sus secretos. –Susurré con voz melosa, depositando un beso en su hombro desnudo.

─ ¿Qué clase de secretos? –Me miró y alargó su brazo para acariciar mi mejilla─ ¿Me los vas a contar?

Trust - Justin BieberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora