Veinte~

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La sensación de humedad, esa sensación que ocurre cuando tienes temperatura y te hace sentir horriblemente incómodo fué
lo que me terminó despertando, según yo no parecía haber dormido mucho, parecía solo haber sido un parpadeo y seguía sintiéndome bastante mal, tanto así que mis ojos y mi nariz ardían, sin hablar de mi boca que se mantenía demasiado seca, impidiéndome si quiera poder hablar con claridad. Mi cabeza ya no dolía tanto pero aún así sentía una incomodidad extraña. Mi cuerpo poco a poco empezaba a doler y las ganas de vomitar se hacían incluso más evidentes.

Saqué un momento la toalla húmeda de mí frente, ésta ya había dejado de estar fría, tiré con mis pies las frazadas hacía abajo para refrescarme un poco y no sentirme tan sofocado, pero apenas lo hice, empecé a tiritar al sentir un frío desmesurado recorrer mi piel... Odiaba estar enfermo.

Me levanté porque no quería estar solo aquí, necesitaba compañía y Hoseok ya no estaba aquí. Mis pies al tocar el frío suelo hicieron que mi cuerpo se estremeciera, pero de igual forma no me detuve. Crucé la puerta con cuidado de no hacer ruido para ir a la sala... La voz de Hoseok conversando con otra persona me hizo sentir curiosidad. Apenas entré a la sala lo vi en el sillón, estaba de espaldas hacía mi, así que no me vió. Estaba con su laptop y mantenía una video llamada con alguien, no podía oir quien era la otra persona o siquiera que decía, ya que éste estaba usando audífonos, pero evidentemente despertó mi curiosidad.

—No... No ha preguntado nada más, tampoco tengo planeado decirle...— Le escuché decir algo preocupado— Al menos no ahora, creo que no funcionará de todas maneras.

Veía como éste escuchaba atentamente lo que fuera que la otra persona le estuviera diciendo mientas desordenaba nervioso su cabello.

—Lo sé... Será esfuerzo período...  Pero no hay nada que hacer... Él ahora está durmiendo... Llegó algo enfermo, así que lo hice dormir— Entendía que se estaba refiriendo a mi— No, no hay forma que despierte por ahora, no nos escuchará.

Claramente no los estaba escuchando, al menos no lo importante que era lo que decía la persona detrás de la pantalla, pero me parecía extraño que no quisiera que lo haga.

—Hemos tenido días difíciles, la verdad...— Dijo soltando un leve suspiro que dió paso a un gran silencio— Yo estaba pensando eso... Me duele un poco tener que decírselo... Se que va a sufrir, pero yo no creo que pueda aguantar más.

Hoseok empezó a acomodarse mejor, así que me escondí un poco para no ser descubierto espiando.

—Tranquila... Eso me pasa por actuar apresuradamente...— Volvió a decir mientras se acomodaba mejor en el sofá— Gracias por siempre estar conmigo... Cuando vuelvas dejame invitarte algo, salgamos a conversar por ahí, como en lo viejos tiempos.

No quise seguir escuchando, todo dentro de mí dio vueltas haciéndome incluso difícil el poder respirar... Él estaba hablando con "ella", Traté de salir de ahí lo más silencioso que pude hasta llegar a la habitación y esconderme dentro. Todo lo que había escuchado... no podía ser, tenía que ser un error... Solo me estoy dejando llevar, lo más probable es que escuché mal debido al resfrío... Todo debe tener una explicacion lógica, no es nada malo... Me obligaré a pensar eso. Mi corazón dolía tanto que sólo pude esconderme debajo de mis sábanas cual niño se esconde del monstruo de su armario. Tenía miedo y mucha tristeza que cuando escuché la puerta abrirse de mí habitación no atiné a nada más que hacerme el dormido. Sentí el sonido del agua a mi lado y luego de un momento sentí como me destapaba un poco dejando mi rostro al descubierto y acomodó mi cabello, mis ojos se mantenían cerrados luchando con todas mis fuerzas para no seguir llorando y ser descubierto. El frío en mi frente volvió, había vuelto a colocar una compresa en mi frente, acomodó bien mis frazadas para taparse bien y luego de unos segundos la puerta se volvió a cerrar.

No lies, Just love 2T|| «Hopev»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora