Luna de miel~

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🌚 🍯

Recostados en el sillón mientras mi padre se tomaba un café y leía el diario, Mi esposo acariciaba gentilmente mi espalda. Habían pasado cuatro días desde que celebramos ese día tan especial y hemos estado en casa regaloneando a más no poder. Agradezco que mi padre no se sienta incómodo con nuestras muestras de afecto. Aunque igual, siempre tratamos de no mantener mucho contacto entre nosotros cerca de él.

Solo por precaución.

La casa olía a café y la televisión estaba encendida pero en un volumen tan mínimo que apenas se escuchaba, mi espalda dolía un montón, no se porque pero últimamente la he sentido tan pesada e incómoda que ya hasta me quedaría acostado por siempre para no sentir molestias. Hoy era jueves y quedaba un poco más de una semana para viajar a Nueva Zelanda y quedarnos allá para siempre, así que de a poco hemos empezado a empacar cosas que llevaremos con nosotros. Aunque aún nos falta mucho.

Pero estoy tan emocionado.

-Queda tan poquito...- Susurré cerca del oído de mí esposo quien se estaba quedando lentamente dormido, este me miró con una sonrisa y luego dejó un besito en mi nariz, haciendo que me pusiera muy feliz derepente- Estoy nervioso.

-Yo estoy emocionado de por fin tenerte cerca- Dijo mientras jugaba con algunas hebras de mí cabello- Ya no estaremos lejos nunca más.

Sonreí gustoso al escuchar eso, era cierto después de todo, ya no más video llamadas a las cuatro de la mañana, ya no mas preocupaciones por Hoseok y su salud, ya no más de aguantar tanta distancia.

Lo miré a los ojos porque si, yo amaba perderme en sus ojos, luego de lo que fueron unos segundos me acomodé un poco y elevé mi cuerpo lo suficiente para ver por encima del respaldar del sofá. Sólo mis ojos eran visibles, así que miré disimulandamente si mi padre nos estaba mirando o si siquiera venía hacía acá.

Pero él estaba sumido en su celular.

Dejé escapar una pequeña risita y me volví a acomodar como estaba hace unos segundos, todo esto bajo la atenta mirada de Hoseok quien me mostraba lo curioso que estaba, sentí sus manos aferrarse nuevamente a mi cintura entonces me acerqué a él para poder hablarle.

-¿Y si me das un besito?- Lo miré riendo juguetonamente mientras él sólo podía sonreír mientras yo con mi dedo índice daba pequeños golpecitos en mis labios- Uno chiquitito.

Hoseok mordió su labio y escondió rápidamente su rostro en mi cuello, podía sentir su pequeña risa que me hacía cosquillas.

-¿Solo uno?- Preguntó ahora sacando su rostro de aquel escondite. Lo miré con el rostro pensativo, entonces me largue a reír bajito.

-¡Muchos!- Y empecé a abrir y cerrar mis manos en señal de que quería muchos besos.

Hoseok no esperó ningún segundo y había atrapado mi boca en un beso, ambos abrimos los ojos entremedio y sin separarnos empezamos a reír de manera cómplice... Pero como todos nuestros besos pronto empezaron a tornarse mucho más serios.

Ninguno de los dos tenía intenciones de separarnos y si no lo haciamos, algo muy malo ocurriría casi en presencia de mí padre.

Y nadie quería eso.

Pero bendita sea... (¿O no muy bendita sea?) la persona que tocó el timbre haciendo que en el acto nos separarnos. Hoseok enseguida acomodó su frente en mi hombro mientras sentía su pesada respiración. Me levanté lo más rápido que pude tratando también de calmarme y fuí a abrir la puerta, apenas las personas afuera se dejaron ver uno de ellos saltó a mí y yo ya pensaba que se trataba de un ladrón.

No lies, Just love 2T|| «Hopev»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora