—Vamos al comedor por algo, ¿sí? —MinAh me invitó amablemente, levantándose emocionada de su lugar.
—Claro —sonreí al sacar mi cartera de la mochila y guardar mi teléfono en el bolsillo del suéter—. Vamos.
Caminamos tranquilamente por el campus. Observé maravillada todo el recinto.
Bastante bonito. Debe ser por eso que es un poco costoso.
MinAh rió levemente al notar mi curiosidad.
— ¿no has visto muchos colegios para seguir maravillandote todavía?
—Bastantes... —suspiré con una sonrisa y un suave encogimiento de hombros— pero no sabes que tan curiosa puedo llegar a ser... —dije mientras mi mirada se concentraba en el cielo.
Me sorprendí mucho al ver que MinAh compartía los mismos gustos que yo con respecto a la comida. Nos sentamos en una de las mesas afuera del comedor y platicamos sobre algunas cosas, que sólo las tenía en mente, para continuar con lo que realmente quería saber.
—Hace un momento en clase... —divagué como si realmente no me importara el tema, incluso tomé un poco de fruta y la llevé a mis labios— ese chico...
— ¡Oh, no! —me interrumpió de inmediato— No me preguntes nada sobre ese chico por más curiosa que estés.
— ¿Por qué? —me sorprendí por su brusca reacción— ¿Sucede algo malo? ¿Te hizo daño? —me preocupé.
—No, no —negó enseguida con la cabeza—. Él no me ha hecho nada —no sé si fue alucinación mía, pero creí verla sonreír de manera tonta como si deseara que eso algún día pasara—, aunque es un "caso perdido"... —continuó comiendo algunos bocadillos de su almuerzo—. Siempre ha sido castigado y nunca entiende. Él junto a su grupo de amigos, son lo "peor" de la escuela.
— ¿Grupo de amigos? ¿Lo peor?... —lancé las preguntas al aire, sin querer una respuesta concreta de alguna de ellas— ¿Por qué no simplemente lo expulsan si sólo causa problemas? —bufé apoyando mi mejilla sobre una de mis manos.
En mi antigua escuela las cosas funcionaban así y sinceramente, ese chico pálido me había desagradado desde el primer momento en que lo vi. No entendía a dónde quería llegar con esa actitud.
—Es que nadie sabe cómo es que obtienen tan buenas notas en todo —exclamó completamente envidiosa al igual que incrédula—. Hasta en la clase del profesor Choi. Supongo que esa es una de las razones de porque no es expulsado todavía. Dan prestigio a este lugar... —se encogió de hombros, resignada a ello—. Además, no creo que la directora lo piense en hacerlo realmente. Su padre da mucho dinero a este lugar.
—Entonces, ¿qué hacen? ¿Por qué son lo "peor"? —dramaticé la última parte, todo sonaba muy tonto y no quería creerlo tampoco.
—Es que no se toman nada en serio ¿Lo viste hace un momento? Acosa a la profesora Shin. Ella es muy elegante y linda, siempre le ha recalcado su lugar pero él insiste, a tal grado que la profesora siempre lo corre de su clase y sólo presenta exámenes finales aprobándolos todos con calificación excelente —bebió de su jugo—. Su verdadero problema es con el profesor Choi, el prometido de la profesora Shin... ¿ya te imaginas?
— ¡Cielos! —exclamé casi asfixiándome con un pedazo de fruta. Empecé a toser varias veces hasta que MinAh me ayudó a escupirlo de vuelta— ¿El profesor Choi y la profesora Shin están comprometidos? —ella asintió— ¿Por eso lo odia?
—No, al contrario. El profesor Choi es muy maduro y paciente. Lo ve como un simple niño.
— Entonces, ¿cuál es el problema? —cuestioné más curiosa, recargándome ahora sobre la mesa con intriga.
— A veces Min llega tarde a la clase del señor Choi y se atreve a dormirse ahí...
«Eso debe ser molesto para el profesor Choi, yo también lo regañaría pero no es suficiente para castigarlo así, como vi... »
—En la mañana... me encontré con el profesor Choi sujetándolo, de una manera-... —«Salvaje»—. Estaba sumamente molesto, ¿qué hizo Min?
—Te lo dije. Dormirse. El profesor lo llamó "señor Min ¿Dónde está su trabajo?", somnoliento le dijo "no lo traigo" el profesor se masajeó las sienes "¿a qué se debe su falta esta vez, señor Min?" Min sonrió "ya sabe, no tuve tiempo. Estuve toda la noche con un par de rubias trabajando..." el profesor sonrió "¿de verdad? pues entonces debió traer un escrito excelente" Trataba de seguirle el juego. "Usted no entiende profesor, estaba *practicando*con ellas, antes que la señorita Shin llegara" —MinAh suspiró pesadamente y negó con la cabeza— y esa fue la gota que rebalsó el vaso...
—Es un imbécil... —volteé los ojos en blanco— ¿Cómo se atreve a meterse en una relación de profesores? El profesor de matemáticas es muy guapo, es digno de la profesora Shin ¡Min no está a su nivel!
—Lo sé —sonrió encogiéndose de hombros—. Oye, voy al baño —miró su móvil— faltan unos minutos, así que mejor te veo en clase ¿vale? —asentí.
MinAh se fue y yo terminé mi almuerzo. Me levanté con la bandeja en una mano mientras que con la otra guardaba mi móvil en el bolsillo nuevamente.
No presté mucha atención al frente y con sólo un paso, tropecé de inmediato con alguien.
—Lo siento... —dije rápidamente, inclinando la cabeza a modo de disculpa, levantando la vista para observar a la víctima de mi distracción.
— ¿así que Yoongi no está al nivel de la profesora Shin? —cuestionó un chico de voz grave mientras avanzaba firmemente hacia mí— ¿Quién eres tú para decir eso?
Me asusté. Enseguida lo hice, no sé si por ser descubierta hablando mal de una persona o por la mirada furiosa que tenía ese chico hacia mí.
Retrocedí lentamente, para no desafiar a la bestia, hasta que mi cadera chocó contra la mesa detrás de mí. Si no fuera porque la bandeja estaba en medio de ambos, no me hubiera sentido tan segura.
El chico era bastante atractivo a decir verdad, piel ligeramente oliva, no tan delgado pero tampoco muy musculoso, se podría decir que estaba en forma. Su cabello era color castaño y ojos café oscuro... ojos que me miraban amenazantes.
— ¿P-por... por qué... l-lo dices?... —titubeé nerviosa mientras apoyaba una mano en la superficie de la mesa para no perder el equilibrio. Ese chico seguía empujándome mucho.
—Lo acabo de oír de tus lindos labios... —sonrió mordiéndose el inferior— ¿Cómo te atreves a hablar así de un Bangtan?
— ¿B-bang...tan? —pregunté confusa con miedo a la respuesta.
— ¿Cómo es que una chica como tú no lo sabe? —cuestionó acercándose peligrosamente— ¿debería explicártelo?
Sentí sus manos tan cerca de mi cuerpo y la parálisis de la situación, no me permitía impedirlo.
Casi chillé en ese instante. Sin embargo, el timbre del final del almuerzo sonó en todo el instituto, aliviando la tensa situación un poco.
—¡Lo siento, tengo que irme! —le aventé la bandeja de comida para poder salir de una buena vez de esa encrucijada.
Corrí asustada de regreso a clase.
«Eso estuvo muy cerca... »
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Do you wanna know? -BTS-
أدب الهواةUna chica nueva. Un chico problemático. Una mala e inestable combinación. «Te diré "te amo", si eso es lo que necesitas...» Él no es el típico chico malo y ella no es la típica chica que intentará hacerlo cambiar. "No eres lo que ella merece pe...