Do you wanna know? -BTS-

Capítulo 33... Suga...

~5~

Cuando salí de la oficina de mi asesora, di un profundo suspiro y deslicé las manos por las correas de mi mochila en un afán de querer sentirme más segura.

Tuve un pequeño deja vu sobre el primer día, sin embargo, al avanzar por el pasillo, no me encontré con el chico blanquecino siendo aprehendido y la directora tampoco estaba acompañándome.

No había rastro de Min desde hace muchísimo tiempo y sus cosas fueron retiradas una mañana, por un empleado de su familia. Me preguntaba, dónde podría estar ahora. 

Hoseok se encontró con sus amigos temprano y se vio emocionado cuando le propusieron recorrer el colegio por última vez. Nunca supe porqué demonios hacían eso pero de esa misma manera, obtuve una primera impresión sobre él.

No quise obligarlo a esperar fuera de la fastidiosa oficina, por lo que acordé llamarle cuando saliera de ahí mientras él disfrutaba con sus amigos.

Seguí caminando despacio hasta mi casillero. Había algunos compañeros haciendo lo mismo que yo, tomando las cosas que le hacían falta para desalojar por completo; aunque al cerrar mi gaveta, noté una presencia peculiar un par de casilleros adelante.

Nayeon tomaba lo último de sus cosas sin prestarle atención a nadie. Se veía tan deprimida y altiva a la vez, que simplemente rodé los ojos.

Recordé que le encantaba besarse con el pálido frente a mi casillero para molestarme, creo que en cualquier sitio en el que estuviera, aunque cuando éste se fue, se volvió sólo un zombie, un cascarón.

A veces decía comentarios molestos a mis espaldas, nunca se atrevió a enfrentarme de nuevo y mientras más se deterioraba con la ausencia de YoonGi, dejó de hacerlo. 

La ignoré completamente aunque ella giró a verme cuando pasé a su lado.

" ¿Dónde estás?" preguntó Hoseok en un mensaje.

No lo abrí, no quería que supiera que lo había leído y seguí caminando lentamente en mi propio último recorrido, por el colegio.

A pesar de que éramos novios, me di cuenta que la mayoría de nuestras citas eran fuera de las instalaciones. Sin contar las áreas comunes, no había otro lugar que me trajera recuerdos con Hoseok.

No era como ver la imagen del pálido bajo los palcos de las canchas deportivas, en medio de un pasillo, un salón y sobre todo, en la azotea del edificio. 

Alejé esos pensamientos de mi cabeza, no había razón para pensar en YoonGi si nunca nos unió algo real, algo profundo.

Si resultabamos un caos juntos.

*— ¿Dónde estás? —preguntó Hoseok, llamándome finalmente.

*—Pensaba —suspiré lentamente—. No, nada. No importa... —me arrepentí de haber dicho eso de inmediato—. Te veo en el estacionamiento, ¿de acuerdo? —respiré con profundidad separándome del barandal de concreto, donde esa vez me escondí con YoonGi

*— ¿sigues en el colegio? —preguntó— ¿Te sientes bien?

*—Sí. No te preocupes.

Bajé despacio del edificio, intentando liberar mi mente de todos aquellos recuerdos con el blanquecino; que me hacían sentir, hasta cierto punto, culpable.

[***]

—¿Estás triste por lo de nuestros padres? —cuestionó cuando volvimos a casa.

—Oh... —confundida lo miré por un instante porque ni siquiera lo recordaba, aunque en el momento en que me enteré, me puse un poco mal.