C. 24: Debajo de la lluvia
Cuando Francesca regresó al departamento, había una tormenta muy fuerte afuera. Los truenos retumbaban el suelo, y los relámpagos se hacían más y más numerosos. Sonó su teléfono. Creyó que era Marco, pero no, era Diego.
-¿Hola? ¿Diego?-dijo Francesca extrañada.
-Francesca,-dijo Diego, en el fondo se escuchaban las gotas de lluvia cayendo-estoy afuera de tu departamento.
-¿Qué? ¿De qué hablás, Diego?-dijo ella.
-Estoy esperando a Violetta. Me he dado cuenta de que la amo más de lo que creía. Por favor, dile que estoy aquí. Necesito decirle lo que siento.
-¿C-como que estás afuera? ¡Esta lloviendo! ¡Vas a resfriarte!-dijo Francesca.
-No me importa. La amo, y necesito decírselo.-admitió él.
-No, Diego. Ella te ha olvidado, está con León, sólo abandoná todo.-dijo Francesca.
-No. Me quedaré aquí hasta que baje.
Francesca se estaba hartando.
-La verdad no entiendo porque ustedes los hombres siempre tratan de hacer cosas "románticas" que sólo sofocan a las mujeres.-dijo Francesca haciendo referencia a Marco.
-Porque estamos enamorados. Y un hombre enamorado, bajaría el cielo para nuestra amada.
-Pues seguí esperando, porque Violetta no bajará.-dijo Francesca, y colgó.
-¿Fran?-dijo Violetta.
-¡Vilu! ¡Ya llegaste!-dijo Francesca disimulando-¿Cómo te fue mostrando la canción?
-Ahora no quisiera hablar de eso. Sólo quiero ir a dormir...
-Sí, eso es lo mejor...-dijo Francesca.
-Francesca, ¿qué te pasa? Te noto rara.-notó Violetta.
-¿Yo? ¡No! No estoy rara...-dijo Francesca. Por mucho que supiera que Diego la amaba, no quería que Violetta volviera a pasar por esa situación.
-Bueno, ya me voy. Buenas noches.-dijo Violetta.
-Chau.
Francesca también se fue a dormir, pero alrededor de las 12, le dio un insomnio terrible. Pensó en todo los que estaba pasando con Diego y Violetta. Y se preguntó si Diego seguiría afuera. Se asomó por la ventana, y efectivamente, ahí estaba. Sentado en el suelo de la entrada del edificio. Francesca no pudo evitar sentir lástima por él. Tal vez en realidad amaba a Violetta, y estaba muy arrepentido de su error.
También pensó en lo que Violetta sentía por Diego. Como le contó lo que sintió por él cuando se reencontraron, cuando Diego había estado ahí para ella cuando Violetta tuvo el accidente, y también la canción que Violetta le había escrito a Diego.
-Fran, ¿qué tienes? ¿Por qué estás despierta?-preguntó Violetta adormilada saliendo de su cuarto.
Y ahí se dio cuenta, de que había abandonado el plan por no mentirle a su mejor amiga, pero evitando que esté con él que ama, también le mentía.
-Violetta, debo decirte algo...-dijo Francesca.
-¿Qué pasa, Fran? Me estás asustando...
-Violetta...Diego está afuera...-reveló Francesca.
-¡¿Qué?! ¿De qué hablás?-preguntó Violetta confundida.
-Si, él quiere decirte que te ama y...-trató de decir Francesca-está arrepentido...
Violetta no pudo evitar tomar su abrigo, y salir del departamento. Quería correr hacia donde estaba Diego, y permanecer en sus brazos para siempre. Y cuando salió del edificio, ahí estaba. Todo empapado, con un pequeño paraguas, parecía que lloraba.
-¿D-Diego?-tartamudeó Violetta, se moría de frío, pero lo único que la hacía temblar era ver a Diego.
La cara de Diego se iluminó.
-Violetta...-dijo él.
Violetta se acercó a él. Ambos sonrieron.
-¿Que hacés aquí?-preguntó ella.
-Estoy aquí por ti...
Violetta se sonrojó.
-Estás loco...-sonrió Violetta, mientras se acercaba a él.
-Si, loco de amor, por ti...-admitió Diego sonriendo.
-Yo, debo explicarte lo de León...
-No.-dijo Diego-No necesito ninguna explicación, sólo quiero vivir este momento...contigo...
Violetta estaba cada vez más cerca de Diego. La temperatura era de -2 grados, pero ambos estaban más rojos que un tomate.
-Diego...
-Violetta...
Ambos juntaron sus labios. Así es, se habían besado. Y no era un sueño. Violetta quería, que si era un sueño, que despertara ahora mismo...
Pero no, era la realidad. Se estaban besando, bajo la lluvia. Y era maravilloso.
Había imaginado ese beso como un momento magnífico, pero ahora que era la realidad, era perfecto. Y de repente el tiempo se paralizó, todo estaba bien, nada podía salir mal.
Y Violetta se dio cuenta, que quería permanecer ahí para siempre.
*NOTA* ❤❤❤ Besho Besho ❤❤❤
