Secretos Dolorosos | Sasusaku | Temporada I & II

Final

-Tranquilízate -dijo el pelinegro con voz neutral- La idea es que viva, no que muera en un accidente automovilístico.

La pelirrosa parpadeó rápido y regresó a la realidad. Se había sumergido tan profundamente en sus pensamientos que no había prestado atención a cómo estaba conduciendo. Entró en pánico por unos segundos cuando se percató de que estaba yendo excesivamente rápido y bajó la velocidad inmediatamente. Se dio cuenta de que unas lágrimas habían escapado por sus ojos y se habían asentado sobre sus mejillas. Las secó con la mano y pretendió normalidad.

-¿Estás asustada? -preguntó él, aún neutral.

"¿Por qué estás tan tranquilo? ¿Cómo puedes no tienes miedo en una situación como esta?" La pelirrosa quería decir y preguntar tantas cosas, pero se contuvo. Se aclaró la garganta y respiró hondo.

-Un poco alterada -respondió, intentando sonar lo más tranquilamente posible- Fue muy repentino, solo... me tomó por sorpresa. Es todo.

-Hm

El silencio inundó el carro. Ella miró hacia su derecha. Sasuke tenía los ojos cerrados, su rostro se encontraba serio como siempre. Su cabello se encontraba desaliñado. Los habían sacado de la cama a las 5 de la mañana, después de todo... Y aun así, se veía como un rey. Guapo como la primera vez que cruzaron miradas aquel miércoles a la salida del colegio. Tantas cosas habían pasado desde entonces.

-Flashback-

-Es muy guapo -dijo una chica rubia, sacando a la pelirrosa de sus pensamientos. Había estado mirando a aquel pelinegro desde hacía rato pero no se había dado cuenta.

-Lo que tú digas -contestó ella, algo sonrojada, pero fingiendo desinterés.

-Vamos Sakura, no me dirás que no te atrae Sasuke Uchiha -insistió

-Para nada -bufó la pelirrosa- ¿Cómo me podría gustar alguien tan... tan...

-¿Perfecto? -suspiró su mejor amiga

-Pendejo.

-Fin del flashback-

La pelirrosa rió al tiempo que unas lágrimas se escapaban por sus ojos. Se secó las lágrimas y suspiró. Volteó el rostro nuevamente y observó al pelinegro por unos segundos. No había dicho nada desde hacía rato y no había movido un solo músculo. Probablemente se había quedado dormido. No lo culpaba, era demasiado temprano y no habían podido dormir casi nada.

La pelirrosa pensó en la pregunta que le había hecho el pelinegro hacía solo unos minutos.

-Asustada... -dijo ella, pensando en voz alta.

-Flashback-

Entonces el pelinegro se percató de cierto color purpúreo que se asomaba bajo las mangas remangadas de la pelirrosa. Él tomó rápidamente su brazo y ambos dejaron de caminar.

No...

-¿¿Qué es esto?? -le preguntó mientras miraba fijamente su brazo

El pelinegro levantó su brazo y con la otra mano intentó subirle la manga un poco más para poder observar la marca completa. La pelirrosa lo detuvo en seguida y se soltó del agarre.

-Nada -dijo ella, entrando en pánico. Maldición pensó, mientras se bajaba las mangas, intentando cubrirlo.

Al Uchiha le molestó que intentara cubrir lo obvio y volvió a tomar su brazo, esta vez con un poco más de fuerza para que no se pudiese soltar de nuevo. Entonces, subió la manga del polo lo más que pudo y reveló el tamaño completo del moretón.