Secretos Dolorosos | Sasusaku | Temporada I & II

Capítulo 3

El día se pasó volando luego de eso.

Naruto se llevó a Hinata lo más rápido que pudo, hoy saldrían juntos al cine. Ino por fin tendría su cita con Shikamaru y al parecer Ten ten tenía algo que hacer con Neji, algo se traían entre manos.

Todos desesperados salían corriendo con sus mochilas rebotando en sus espaldas. Todos excepto dos adolescentes nerviosos y confundidos.

La pelirrosa entró lentamente al aula 685 sin saber qué o a quién esperar allí dentro. Cuando entró se topó con la gran sorpresa de que estaba vacío. Dio unos pasos temerosos hacia adelante, como los bebés cuando recién dan sus primeros pasos y no saben qué esperar. Se adentró al misterioso y solitario salón y apenas entró, escuchó el sonido de la puerta cerrarse detrás de ella. Volteó de inmediato y se topó con unos ojos negros como la oscuridad más densa, que la miraban fijamente.

-¿Tú?¿Por qué me citaste aquí? ¿Qué quieres de mí? -le preguntó confundida. Él no respondió, sólo se acercó lentamente a ella hasta que sintió el roce se sus respiraciones y la besó. No fue un beso suave y lento, todo lo contrario. Fue un beso rápido y apasionado, lleno de adrenalina.

 

Él la empujó con el beso y la llevó contra la pared. La acorraló con ambos brazos, uno a cada lado de ella, impidiendo así, cualquier intento de escape.

La pelirrosa sintió aquellos labios contra los suyos y se sumió en el beso. Pero unos segundos más tarde abrió los ojos de golpe. Tocó tierra. Volvió a la realidad y se dio cuenta de lo que estaba sucediendo.

No.

-espera… no… -le dijo mientras trataba de separarse de él, lo cual le fue sumamente difícil. Maldición, sí que era bueno besando. Pero, no. No podía dejarse llevar por su cuerpo. Ella era más interligente que eso. Además, ¿Qué querría él de ella? Nunca habían mantenido una conversación por más de dos minutos. Era seguro que probablemente lo único que quería era eso, la única cosa que buscaba en todas: sexo.

-No –dijo firmemente la pelirrosa y esta vez lo empujó con más fuerza, por fin logrando separarse de él.

-¿Qué? –dijo frustrado

-¡¿Es que te has vuelto loco?! ¡No puedes solo citarme así y besarme cuando se te da la regalada gana! -le reprochó

-Yo creo que sí -dijo él mientras se acercaba de nuevo a sus labios

-No -dijo ella. Poniendo sus dedos sobre los labios de él- ¿Crees que es así de facil? Yo no soy como tus “amiguitas”. Preferiría cortarme el brazo antes de tener algo con alguien como tú, Sasuke Uchiha.

-¿En serio? -dijo incrédulo y se acercó a su oído- ¿Entonces por qué tu corazón esta palpitando tan rápido? -le susurró

-Es que me das tanta rabia que se me sube la presión -le respondió mirándolo fijamente tratando de no reír por la estupidez que acababa de decir. Obviamente era una mentira. Cuando se molestaba mucho por algo se le subía la presión sí, un poco, como a la gente normal, pero cuando estaba junto a él su corazón volaba por los cielos.