Capítulo 22 - Final

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Habían pasado 2 semanas desde que empezaron su entrenamiento secreto. Los chicos estaban mejorando con creces sus habilidades pero Sehun veía que no era suficiente.

Mark había estado enseñando a todos sobre el tratamiento de heridas y cuidados básicos. Algunos chicos parecían tan interesados en el tema que Sehun pensaba que alguno se volvería médico en un futuro.

Baekhyun había dejado su silla de ruedas atrás y ya podía caminar perfectamente. Ahora no paraba de corretear de un lado a otro y entrenar su poder hasta que toda su energía se agotaba por completo y entonces Chanyeol le tenía que llevar en brazos hasta su dormitorio.

La relación de Chanyeol y Baekhyun era un secreto a gritos. Todos sabían de ellos dos pero nadie decía nada. No querían ver a Chanyeol enfadado. Sehun, sin embargo, tuvo una experiencia no muy agradable con esos dos chicos. Él acababa de dejar a Luhan en su habitación después de un pequeño entrenamiento privado que habían hecho, y estaba andando por el pasillo cuando escuchó algo en los baños. Fue a comprobar de qué se trataba ya que eran las 2 de la mañana y nada más entrar vio a Baekhyun semi desnudo gimiendo sobre la mesa de los lavamanos y a Chanyeol de pie practicándole una felación. Sehun se había quedado congelado en su lugar con los ojos bien abiertos.

—¡Chanyeol! ¡Sácate eso de la boca! —fue lo primero que se le ocurrió gritar.

Chanyeol se quedó en ese momento paralizado. Baekhyun soltó un grito y pegó una patada a Chanyeol para que se apartara y pudiera taparse la entrepierna con las manos, con la mala suerte de que la patada fue directa a la entrepierna de Chanyeol y éste solo podía soltar quejidos de dolor.

—¡Mierda, Sehun, me cago en todo! —dijo Chanyeol entre gruñidos— Vete a follar con Luhan y déjanos en paz.

Sí, bueno, eso de volver a acostarse con Luhan no había vuelto a pasar. Lo había intentado, sí, pero siempre algo o alguien los interrumpía. La mayoría de las veces ese alguien era Jaejoong. Por suerte el padre de Luhan no les había pillado en situaciones comprometidas, aunque la última vez Sehun casi le grita que se fuera porque tenía dolor de huevos y quería que Luhan se hiciera cargo de ello.

No es que ahora pensara todo el rato en sexo, pero con Luhan no podía controlarse.

—No podéis hacer estas cosas en sitios así. Esta prohibido. —Sehun se cruzó de brazos.

—Lo siento, profesor, no volverá a pasar. —dijo Baekhyun avergonzado recogiendo sus pantalones y poniéndoselos rápidamente.

—¿Eh? ¿Cómo que no volverá a pasar? —Chanyeol cambió de actitud a una más infantil. Sehun casi empieza a reír cuando vio al chico patalear en el suelo— ¿No te estaba gustando?

—¡Llamitas! —Baekhyun se tapó la cara con las manos. Estaba muy sonrojado— No pienso decirlo delante de Sehun hyung. Vámonos. —Baekhyun tomó la muñeca de Chanyeol y lo arrastró fuera del baño sin atreverse a mirar a Sehun a la cara.

Sehun decidió volver a la habitación de Luhan. Después de ver a aquellos dos le apetecía dar un último beso de buenas noches al menor.


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—¿Xiumin? —Chen avanzó hasta la esquina de la habitación de Xiumin donde el chico se encontraba de espalda a él, temblando y abrazándose las piernas— ¿Estás... bien? —preguntó tocándole el hombro. Xiumin apartó su mano con fuerza.

—Vete.

—¿Estás llorando?

—¡Vete!

—Pero Xiumin...

Los monstruos no lloran { EXO }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora