Era más que obvio que que se había metido en un quilombo de la mierda. Tenía una cita con Moisés y a la vez con Ramsés...
Azeneth: Bueno... No se puede poner peor -dijo agarrándose la cabeza-
Fue cuando tocaron sus puertas... Ella dio el permiso de que entrara y entro Ikeni...
Azeneth: Ikeni... -dijo nerviosa, se levantó de su cama y comenzó a acomodar su cabello- Por los dioses... Mírame, estoy desarreglada
Ikeni: Perdón si te desperte -se perdono el joven soldado-
Azeneth: No, yo... Ya me había despertado, tuve una pesadilla -dijo con ironía-
Ikeni: Bien... Si lo deseas puedo venir mañana y... -lo interrumpe-
Azeneth: ¡¡No!! Por favor habla Ikeni... -dijo ella llendo hacia él- Siéntate -le ofreció lo que él obedeció- ¿¿Quieres algo?? ¿¿Alguna fruta, agua...?? -pregunto ella-
Ikeni: No, ya comí... -dijo él- Solo vine a decirle algo
Azeneth: Claro ¿¿Qué es...?? -pregunto desesperada-
Ikeni: Mañana tengo hora libre todo el día por el festejo de la tumba terminada del rey... Así que iré al Nilo
Azeneth: ¿¿Al Nilo...?? -pregunto emocionada- Hace tiempo que no iba al Nilo
Ikeni: Por eso vine a verte -dijo tomando sus manos lo que provocó un sonrojó en ella- Quería que fuéramos juntos al Nilo...
Azeneth no sabía cómo responderle... Estaba tan emocionada que las palabras no le salía de la boca...
Ikeni: Por supuesto... Comprendo que usted este ocupada con otros asuntos y... -lo interrumpe-
Azeneth: ¡No! No tengo nada que hacer mañana -mintio- Si... Si quiero ir mañana con tigo al Nilo ¡¡Si!! -dijo aún más emocionada y se lanzó en sus brazos tirándolo para atrás- ¡¡Y Mil Veces Si!!
Ikeni: Que alegría Azeneth... -dijo pero luego se arrepintió- Perdoneme, princesa Azeneth
Azeneth: Tú puedes llamarme Azeneth... -dijo ella observando lo a sus ojos-
Ikeni: Bien... Mi Azeneth -dijo riendose provocando aún más sonrojó en su rostro- No vemos mañana a las 6:00 -dijo llendose más tranquilo que los otros dos, al salir lo único que hizo fue festejar despacio- Si...
Se hallaba Azeneth sentada en su cama abrazando a su almohada de la felicidad. Fue cuando grito de la alegría en ella para que no sonara tan fuerte y alertara a los oficiales. Hasta qué...
Azeneth: Hay no... -dijo agarrándose la cabeza- No, no, no, no, no, no -dijo sería y alterada- Esto no me puede estar pasando a mí ¡¡Dioses!! -grito al cielo- ¿¿Y ahora...?? ¿¿Cómo le hago??
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La Luna De Los Amantes
RomanceEn 1299 a.C, la princesa Henutmire fue a dar un paseo al Río Nilo, sin saber que dentro de él, entre unos juncos encontraría una hermosa cosita escondida en ellos, una hermosa niña bebé a la que después llamaría Azeneth. A medida de su crecimiento...