La Luna De Los Amantes

Capitulo 41: "La Propuesta De Moisés"

Cuando Ramsés se retiró, Azeneth se hallaba recostada en una de las columnas... Estaba un poco triste por pelear con Ramsés...

XX: ¿¿Qué haces afuera pequeña?? -pregunto una voz detrás de él. Azeneth se dio la vuelta y allí estaba Moisés-

Azeneth: ¿¿Moisés?? Por los dioses ¿¿Cómo entraste?? -pregunto confundida-

Moisés: Tengo mis manias -dijo riendose y caminando hacia ella- ¿¿Cómo estás??

Azeneth: Un poco triste -dijo con una cara larga-

Moisés: ¿¿Y por qué...?? -pregunto el joven príncipe-

Azeneth: -ella cruzó sus brazos, estaba por decírselo pero luego recordó lo que pasó en la fiesta- ¿¿No tienes un lugar mejor a donde ir Moisés?? No sé, cómo ¿¿La casa de Senet??

Moisés: ¿¿La casa de Senet?? -pregunto impresionado- Por Isis Azeneth, yo no soy uno de esos hombres que va a esos lugares

Azeneth: Deja de mentir Moisés... -dijo sería y casi gritándole- Por favor vete de mis aposentos

Moisés: No me iré... Quiero hablar con tigo un poco -dijo con cara de cachorrito-

Azeneth: Bueno yo no... Estoy cansada, quiero dormir

Moisés: Bueno vamos a dormir -dijo por irse adentro-

Azeneth: ¿¿Disculpa...?? -pregunto con un poco de ironía-

Moisés: Hoy dormiré a tú lado... -dijo el joven príncipe quitándose sus brazaletes y dejando en la mesa su espada-

Azeneth: ¡¿Qué...?! No, no, no, no, no, no -dijo alterado, va hacia la mesa y toma todas las cosas de él y se las da en sus manos- Tú, irás a tus aposentos a dormir y me dejaras toda esta noche en paz -lo estaba empujando hacia la puerta-

Moisés: A claro, si fuera Ramsés o Ikeni si dejarías que se quede en tus aposentos -dijo deteniéndose-

Azeneth: Ni Ramsés, ni Ikeni se quedarían en mis aposentos Moisés... -le replicó-

Moisés: Entonces a mí sí ¿¿Verdad?? -dijo riendose-

Azeneth: ¡¿Qué...?! -se sonrojó- ¡¡No!! Por los dioses vete Moisés

Moisés: No me iré... Hasta que aseptes que vengas con migo mañana a un paseo a la ciudad en caballo

Azeneth: -ella lo pensó y luego dijo seria- Está bien... Mañana iré con tigo a pasear en caballo

Moisés: Esa es mi Azeneth... Entonces ¿¿Mañana?? A las ¿¿6:00??

Azeneth: Si, a las seis Moisés... Ven a buscarme -al empujarlo logro sacarlo de la habitación-

Moisés: Bien... Claro, a las 6:00, vendré a buscarte -ella habia cerrado las puertas- ¡¡Si!! -festejo- ¡¡Juyu!! -grito alegre y tomo a uno de los soldados que custodiaban la puerta de los aposentos de Azeneth y comenzo a bailar con él-

Dentro de los aposentos de Azeneth ella se hallaba recostada en la puerta de los aposentos. Escucho como Moisés festejaba y bufo enfurecida. Luego miro al techo...

Azeneth: Si hay algún dios allí arriba, a de ser que me odia -dijo replicando enojada y sería-