Obras Reales...
El rey de hallaba observando su templo junto con su General...
Seti: No me conforme con una simple tumba mi querido Disebeck. Mandé a construir todo un templo funerario...
Disebeck: Es grandioso... Provocaría la envidia de los propios dioses señor...
Seti: -al solo tempasar que provocaría la envidia de los dioses se alegró- Quiero que mi vida sea incluso mejor que está...
Disebeck: De seguro lo será. Por lo menos se está preparando para eso...
Seti: ¿¿Y los trabajos?? ¿¿Están adelantados?? -le preguntó, el general asintió tras la pregunta-
Disebeck: Si... Los artesanos están terminando las escrituras de las paredes, techos y hasta de lo que solo falta escabar...
Ramsés le dijo algo al oído de Azeneth y ella asintió, ambos se fueron de allí hasta el Nilo. Cuando llegaron, ambos se sentaron a la orilla del Nilo...
Azeneth: Ramsés... ¿¿Estás enojado con migo??
Ramsés: ¿¿Por qué estaría enojado con tigo??
Azeneth: Por... Haberte rechazado...
Ramsés: -mira hacia el frente- Tú rompiste mi corazón con las palabras que dijiste pero... Podemos seguir siendo amigos
Azeneth: ¿¿Aún seguiremos siendo mejores amigos?? -dijo emocionada-
Ramsés: Necesito tiempo... Mejor amigos no, solo amigos... -le dejo en claro-
Azeneth: Bueno, con ser tú amiga me conformo -dijo y beso su mejilla-
Ramsés: Quiero hacerte otra pregunta... -le dijo y ella lo vio confundida-
Azeneth: Claro dimela... -le dijo, él suspiro y la vio sería-
Ramsés: Yo... E visto como Moisés te a visto últimamente, te ve de lejos escondido en los arbustos, vi como una vez entro a tus aposentos ¿¿Tienes algo con él??
Azeneth: ¡¿Qué...?! Ramsés... ¿¿Sospechas que salgo con Moisés?! -dijo enojada-
Ramsés: No... Pero -dijo alterado- Pero me resulta raro que Moisés valla a tus aposentos por la noche...
Azeneth: En ningún momento recibí a Moisés en mis aposentos... Ni lo vi entrar Ramsés...
Ramsés: Bien, bien, dejemos de discutir... Bien estabamos antes...
Azeneth: Pues si, pero tú siempre lo arruinado con tus absurdos celos...
Ramsés: ¡¿Celos Absurdos?! ¡¡Celos Absurdos!! Yo solo te protejo Azeneth...
Azeneth: Por Thot y por todos los dioses Ramsés... Te enojas cuando estoy con mis amigos, no me dejas estar con Ikeni en ningún momento al final, soy tú sobrina o soy tú mujer... -le dijo enojada-
Ramsés: Bueno ya... Dejemos de discutir... ¿¿Si??
Azeneth: Bien... -los dos se quedaron callados cuando...-
Ramsés: ¿¿Quieres jugar...?? -le pregunto-
Azeneth: Bien ¿¿A qué quieres jugar?? -le pregunto-
Ramsés: -se levanta y ayuda a su amiga- Juguemos a que somos dioses...
Azeneth: Bien... Yo soy Isis, gran diosa de la magia y esposa de Osiris...
Ramsés: Yo soy Ra, creador del mundo, el más poderoso...
Fue cuando notaron la presencia de Aarón y comenzaron a burlarse de él...
Ramsés: ¡¡Hey...!! ¡¿Y Tú A Dónde Vas Esclavo Piojoso?!
Azeneth: ¡¡Hebreo Inmundo!!
R/A: ¡¡Hebreo Asqueroso!! ¡¡Hebreo Asqueroso!! ¡¡Hebreo Asqueroso!! -le gritaba y hacia burla a Aarón, él cual se calentó y le dijo-
Azeneth: Mírale la cara, casi parece humano -le dijo riéndose-
Aarón: Y tú Azeneth... ¿¿Quién te crees que eres... Un príncipe...?? Eres una hebrea tan asquerosa y maloliente como yo... Deberías trabajar cargando rocas
Azeneth: ¡¡Cierra Tú Boca!!
Aarón: ¡¡No me callo!! ¿¿Crees que esa ropa cambiará tú sangre?? No es así... Es sangre de esclavo como la mía, eres hebrea Azeneth... Y si no lo sabías ya lo sabes -le dijo serío-
Ramsés: Es mentira... Mentira, cierra la boca -le dijo asercandose peligrosamente- ¡¡Desgraciado... Te Mataré!! -lo empujó haciendo que cayera al suelo-
Azeneth: ¡¡Ramsés...!! -dijo deteniendo lo-
Fue cuando llegaron tres soldados, uno de ellos era Disebeck...
Disebeck: ¡¿Que Está Suecediendo Aquí?! -dijo llegando-
Ramsés: Este esclavo se metió con nostros... -dijo serio abrazando a Azeneth-
Disebeck: Podría matarte por eso esclavo, hubicate en tú lugar -le dijo serio, Aarón se levantó y tomo su jarra, se fue de allí al Nilo- Vengan con migo. El rey ya está preocupado por ti Ramsés... -él general cargo a su hija y se fueron de allí-
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La Luna De Los Amantes
Roman d'amourEn 1299 a.C, la princesa Henutmire fue a dar un paseo al Río Nilo, sin saber que dentro de él, entre unos juncos encontraría una hermosa cosita escondida en ellos, una hermosa niña bebé a la que después llamaría Azeneth. A medida de su crecimiento...