La felicidad de Azeneth era tan grande. No le contó a nadie sobre su verdadera familia.
Todas las noches salía en secreto con Moisés para ver a su familia.
Jocabeth era tan feliz, ya que por fin podía pasar tiempo con su hija que tanto ama.Por otra parte, la caravana de Suleiman se estaba acercando a los dominios de Seti.
Estaban muy serca de llegar. Que los soldados Egipcios que custodiaban la ciudad los vieron...Soldado 1: ¿¿Crees que vengan en son de paz?? -pregunto confundido a su compañero-
Soldado 2: No lo sé... ¿¿Crees que le tenemos que decir al general?? -pregunto viendo a su compañero-
Soldado 1: -él no dijo nada, solo fue en buscas del general Disebeck quien se hallaba en la sala del trono-
Sala del Trono
Disebeck estaba hablando con Seti, de cosas del trabajo, fue cuando llegó el soldado...
Soldado 1: Mi señor... -hizo una reverencia-
Seti: ¿¿Qué ha sucedido ahora?? -pregunto tomando un poco de su vino al igual que su general-
Soldado 1: La caravana del sultán Suleiman se está asercando -cuando dijo esto Seti escupiera su vino y que Disebeck se ahogara con el vino- Aún no sabemos si vinieron en son de paz o en guerra...
Seti: ¡¡¿Cómo Hoza Ese Desgraciado Venir A Mí Reino?!! -grito levantándose de su trono- Desgraciado ¡¡Insolente!! ¡¡Hipócrita... Mal nacido!! -gritaba bajando de su trono y llendose-
Disebeck: ¿¿Sabes si viene con alguno de sus hijos?? -pregunto serio-
Soldado 1: No lo sabemos señor pero... Se sospecha que viene acompañado de su hijo mayor... -le explicó al general el cual solo cambio su mirada y miró a un costado-
Seti se estaba preparando para llegara de Sueliman.
Disebeck puso más guardias en todo el palacio.
Baketmud salió fuera del palacio para recibir a la caravana...Baketmud: -suspiro un tanto nervioso, al solo pensar que hablaría con un otomano y no solo con un otomano ordinario, sino que con el sultán de sultanes del Imperio Otomano.
Suleiman llegó hasta el gran palacio, él y su comitiva, con toda las miradas extrañas de los egipcios.
Bajo de su corcel seguido de su hijo y de Ibrahim y se aproximaron hasta Baketmud el cual solo hizo una reverencia ante ellos- Bienvenidos a nuestro reino ¿¿Qué se les ofrece??Suleiman: Valla recibimiento que nos dan... -dijo serio-
Baketmud: Con el mayor de los respetos mi señor, estamos en guerra -dijo con ironía-
Ibrahim: Y esa una de las cosas por las cuales vinimos a su reinó... Necesitamos hablar con Seti I
Baketmud: Yo... -una voz interrumpo al soldado y al reconocerla, todos los soldados egipcios de allí hicieron una reverencia-
XX: Baketmud ¿¿Sucede algo malo...?? -pregunto-
Baketmud: Príncipe Moisés... Déjeme presentarle al sultán Suleiman -dijo mostrando a Suleiman, este solo miró serio al joven Príncipe-
Moisés: Yo los recibiré Baketmud... -dijo dando una orden, este solo asintió y se hizo a un lado- ¿¿A qué se debe su llegada?? -pregunto con una sonrisa-
Suleiman: Por la guerra que su padre proclamó... -dijo haciendo estremecer a Moisés-
Moisés: ¿¿Guerra...?? No estoy al tanto de eso, por favor, siganmen -les dijo y ellos asintieron-
Cuando entraron al palacio real. Mustafá quedó un tanto asustado al ver tantas estatuillas de dioses paganos.
Moisés noto esto del príncipe otomano y río solo un poco. Ibrahim puso una de sus manos en su hombro...
Ibrahim: Tranquilo, todo estará bien Mustafá...
Mustafá: Este lugar da miedo Ibrahim... Tantos dioses paganos -dijo captando las miradas serías de los soldados Egipcios-
Ibrahim: Guarda los comentarios de los dioses para ti -le susurro-
Seti se hallaba en su trono, esperando a que Suleiman llegará. Las puertas se abrieron, entro Moisés seguido de los otomanos y sus soldados...
Moisés: Padre... -hizo una reverencia, los otomanos no lo hicieron- No me habia dado la noticia de que proclamo una guerra contra los Otomanos
Seti: Hijo mío... De eso hablamos luego -se levanta de su trono y va hacia el sultán parandose en frente de él- Moisés... Vete
Suleiman: Al igual que tú Mustafá...
Mus/Moi: ¡Pero Papá...! -dijeron al unísono viendo a sus padres-
Se/Su: ¡¡Obedezcan...!! -gritaron-
Moisés se fue al igual que Mustafá
Seti: Es hora de hablar seriamente...
Suleiman: Concuerdo con tigo...
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La Luna De Los Amantes
RomanceEn 1299 a.C, la princesa Henutmire fue a dar un paseo al Río Nilo, sin saber que dentro de él, entre unos juncos encontraría una hermosa cosita escondida en ellos, una hermosa niña bebé a la que después llamaría Azeneth. A medida de su crecimiento...