Capítulo 90: "¡¿QUÉ...?!"

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Seti se hallaba aún observándose seriamente con Sueliman. Ibrahim se hallaba allí presenciando todo eso...

Seti: Debería darte vergüenza al venir a mi reino... Suleiman -dijo el nombre del con Odio-

Suleiman: Por lo menos tengo agallas al venir... Seti -dijo de mismo modo diciendo con odio su nombre-

Seti: También noto que has venido acompañado de tus... -se detuvo para tratar de recordá el nombre de sus soldados- ¿¿Tus...?? ¿¿Tus...??

Sueliman: Mis soldados genizaros... -le dijo serio-

Seti: Eso es... Genizaros, había olvidado su nombre... -miro a Disebeck- Espero que recuerdes a Disebeck

Suleiman: Por supuesto que lo recuerdo... Buenas tardes general Disebeck

Disebeck: Sea bienvenido sultán Suleiman...

Ibrahim: Mi señor... A lo que vinimos -le hizo recordar a Suleiman el cual solo asintió-

Suleiman: Es verdad... Seti, me a llegado un mensaje de que proclamaste la guerra contra mi reino y él tuyo

Seti: Efectivamente... -dijo serio- Tú gente saqueó mi barco en donde tenía regalos provenientes de Nubia. Todos esos tesoros eran míos, de mis hijos y esposas

Suleiman: Y por esta razón, vengo en persona a pedir que esta guerra acabe... -Seti miró confundido a Disebeck-

Seti: ¿¿Y cómo planeas hacer eso??

Suleiman: Comprometiendo a mi hijo Mustafá con tú nieta... La princesa Azeneth...

Seti quedó perplejo tras escuchar esto. Miró impactado a Disebeck él cual también lo estaba...

Fuera de la sala

Mientras con Mustafá. Él se hallaba paseandose por el palacio de Seti, seguido de dos soldados genizaros.

Mustafá estaba un tanto nervioso al notar que habían muchas estatuas de diferentes dioses.
Se aserco hasta una de ella, la estatua de Thot, trato de tocar la punta de esta con su dedo para ver si su pico era puntiagudo (recordemos el dios Thot era representado como una ave Ibis) al hacer un poco de fuerza no noto que era tan frágil causando que este se rompiera el pico.
Con mucho miedo y tratando de no hacer escándalo, agarró el pico de la estatua y trato de pegarsela pero... Al ver que no funcionaba lo único que hizo fue arrojarla a un lugar donde nadie pudiera verlo.

Aclaro su garganta y tratando de no mostrar sus nervios comenzó a caminar...

Mustafá: Ustedes no vieron nada -le dijo a sus soldados los cuales se mordían los labios para no reír-

Mientras se paseaban por los jardines, se volvió a asercar a otra estatua pero esta vez de un gato, claro manteniendo su lejanía de esta...

XX: ¡¡Oye...!! ¡¿Quién Eres...?! -grito algo causando que Mustafá casi cayera y que casi tirará la estatua de Bastet, pero fue rápido y la sostuvo abrazándola-

Cuando él miró a dueño de esa voz noto que era una bella chica, de cabellos rubios y ojos azules, piel blanca y labios rojos...

Azeneth: -ella se aserco hasta él y lo miró de arriba a abajo- ¿¿Quién eres tú...??

Mustafá: Eso debería de preguntarte lo yo a ti niña -dijo con orgullo-

Azeneth: ¿¿Disculpa...?? No soy una niña, tengo 15 años y en unos meses cumpliré mis 16

Mustafá: ¿¿Hablas encerio...?? Por Alah, yo cumpliré mis 17, soy más mayor que tú

Azeneth: ¿¿Alah...?? -pregunto confundido- A ya sé... Tú eres uno de esos otomanos ¿¿No es así??

Mustafá: Ten más respeto cuando te diriges ante mí niña -volvio a decir con arrogancia-

Azeneth: Al igual que tú -dijo ella también con arrogancia, pero cruzando sus brazos y cerrando sus ojos-

Fue cuando llegó Ibrahim...

Ibrahim: Príncipe Mustafá... -dijo haciendo una reverencia- Mandan a llamarlo a la sala del trono...

De igual manera llegó Baketmud...

Baketmud: Al igual que a usted príncesa -dijo con sus brazos en su espalda-

Azeneth se miró a Mustafá y él también lo hizo, ambos se miraron confundidos

A/B: ¡¿Eres Azeneth/Mustafá?! -dijeron al unísono pero mencionando diferentes nombres-

Azeneth iba de brazos cruzados al igual que Mustafá, ambos serios. No se querían ni ver.
Pero Azeneth miró a Mustafá y él también lo hizo. Ambos se miraron de mal manera...

Al llegar a la sala del trono, Azeneth corrió a los brazos de su padre y lo abrazo, él asepto su abrazo. Mustafá solo se aproximó hasta su padre...

Mustafá: Mi sultan ¿¿Ocurrió algo... La guerra se detuvo?? -pregunto muy ansioso-

Suleiman: Yo y Seti llegamos a un acuerdo, Mustafá y él asepto que te casaras con Azeneth... -le susurro a su hijo, nadie más que él pudo escucharlo-

Mustafá: Padre ¿¿En verdad tengo que hacer esto?? -dijo nervioso-

Suleiman: Obedece Mustafá... -le dijo serio, Mustafá no tuvo más remedio que hacer lo que su padre le ordenaba.
Él se aserco hasta Azeneth la cual se hallaba con su padre y al lado de Seti. Él se arrodilló causando un sonrojó en Azeneth-

Mustafá: Princesa Azeneth... -se arrodilló- Me haria el gran honor de convertirse... -de su bolsillo saca la cajita y la habré mostrando el bello dije dejando impacatada a Azeneth- En convertirse en mi esposa...

Azeneth: -quedo en shock. Soltó el brazo de su padre y lo miró seria al igual que al rey. Luego miro confundida al príncipe- ¡¿QUÉ...?!

La Luna De Los AmantesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora