Bel siempre estuvo enamorada de William, llegó a amarlo en secreto escondiendo todo su afecto por él. Pero cuando creyó hallar el valor para declarase, Will se suicido dejándola destrozada por dentro y sin que pudiera develarle sus sentimientos.
Al...
No pudimos sacarle nada a Alexa, tenia la mirada fija en un punto sin decir una palabra. Parecía estar hipnotizada, Rebecca la llevo a su casa pero yo desistí de ir a algún lado. El miedo se impregno en mi piel, temía por lo que mi amiga presencio, solitaria me dirigí hacia las calles aledañas a mi casa, estaban tan oscuras que hacían que tuviera la guardia en alto. Camine todo el trayecto con la cabeza baja, me sentía terrible, de lejos oía que alguien mas caminaba tras de mi, parecía errático al desplazarse porque oía como arrastraba sus pies. Gire pero no había nadie, ignore por completo eso. Seguí mi rumbo, volvieron a oírse esos pasos, pero nuevamente no había nada de nada. A lo lejos escuche un claro silbido, me puse la capucha de la chaqueta y seguí. Otro silbido. Apresure el paso. Otro silbido. Mis piernas se apresuraron más. Otro silbido. Comencé a correr. Otro silbido. Parecía como si quisiera llamar mi atención pero era espeluznante en todos los sentidos, tenia los cabellos de punta y no podía pensar con claridad. Se oyeron a varios perros aullar. Una risa hizo eco en los rincones mas profundos, me paralice al sentir que alguien se acercaba. De pronto un mechón de mi cabello se movió de mi cabeza, como si lo estuvieran acariciando. Mi vista se volvió borrosa a causa de las lágrimas, el mechón se movió hacia arriba, vi mi cabello flotando sobre mi cabeza y caí al suelo desmayada del miedo.
