El taxi paro enfrente de la playa, baje un par de escalones, desde ahí mire el horizonte, era precioso, el cielo estaba pintado de un azul claro que contrastaba con el azul verdoso del agua. Iba a bajar otro escalón cuando le vi, ahí estaba el.
Aquel chico de rizos y hoyuelos me estaba esperando. Antes de llegar a la arena me quite mis zapatos y los lleve en la mano que no llevaba las rosas. Cuando llegue a donde Harry le salude besando sus mejillas. Nos quedamos mirándonos uno enfrente del otro, ambos con una sonrisa. Decidi romper aquel silencio que se había formado.
-A si que... ¿tu eres mi príncipe?- pregunte con un tono un poco de burla.
-Sip-dijo marcando sus hoyuelos mientras me entregaba una rosa, la junte con las que me había dado Marie en la zapatería, formando así un pequeño ramo- ¿Preparada para la mejor cita de tu vida?
-Em... Si - intente decirlo lo mas tranquila que pude, pero no funciono, la verdad, estaba un poco incomoda y nerviosa ante la situación, solo había hablado con el una vez y cuando había mas gente, ahora estábamos solos, solos el y yo. Harry noto mis nervios, me miro a los ojos por lo que yo baje la mirada rápidamente. Me tomo del mentón haciendo un poco de fuerza hacia arriba obligándome a mirarle. Me sonrió, dejandome ver sus blancos dientes.
-Tranquila, vas a pasar el mejor día de tu vida, te lo aseguro. Solo... disfruta - me dijo con una sonrisa reconfortante.
-Esta bien -suspire y le sonrei. Harry se acerco a mi y cogio los zapatos de mi mano para luego posar su brazo sobre mis hombros atrallendome a el. Empezamos a andar sobre la cálida arena, acercandonos cada vez mas ala orilla. Cuando el agua llegaba hasta nuestros tobillos nos detubimos. Harry soltó su agarre y se agachó. Empezó a tocar el agua con su mano, mientras yo le mira atentamente, Harry levanto la vista. Me miro con una cara que no me gusto para nada, conocía sus intenciones.
- Harry, no - dije antes de que hiciera nada.
- No ¿que?- pregunto como si fuera un niño pequeño.
- Se tus intenciones, no me mojes, mancharias el vestido - señale el vestido. Volvió la vista al agua y rió.
-Esta bien - se levanto mientras resoplaba- pero algún día te mojare. -Yo reí por lo bajo. Esta vez me agarro de la cintura para poder seguir caminando. Me seguía sintiendo un poco incomoda pero no dije nada.
- Cuentame algo de ti - soltó de la nada.
- ¿Que quieres saber?
- No lo se, um... - puso una cara muy graciosa, por lo que me empecé a reír, el sonrió y me miro - ¿Cual es tu animal favorito? - levante una ceja - No se me ocurre nada mejor - me dijo soltando un pequeña risita.
- ¿Mi animal favorito? - me pregunte a mi misma, Harry me miraba espectante - El gato - dije decidida y orgullosa de mi respuesta.
-¿Enserio? - pregunto con una pequeña sonrisa. Asenti- Yo tengo uno - dijo victorioso.
- Pues yo no tengo porque mi madre no quiere - no entendía porque no quería un gato, si son adorables.
- No te pierdes mucho, a veces es un coñazo tener uno- dijo con cara de disgusto.
- No digas eso, que me enfado contigo - dije dándole un pequeño golpe el el hombro.
- ¡Ay! Eso ha dolido - pasó un par de veces la mano por el lugar en el que le había dado - Era broma tonta - hizo un puchero al ver mi intento de estar seria y me abrazo. Yo empecé reír otra vez. Caminamos por la orilla con el agua rozando nuestros pies. Estuvimos contándonos anécdotas sobre nuestras vidas, el me contaba lo que hacian durante el tour y yo le contaba sobre mi vida en el instituto.
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¡Sorpresa! (Editando)
Teen FictionEn ese momento en el que vi que sus ojos me miraban mi mundo cambio. Ese concierto al que fui obligada a ir cambio mi vida para los restos.