Amor Clandestino |j.b|

25.

Justin.

-¿Ya te sientes mejor?-le pregunte, entregándole en su mano una taza que contiene te de manzanilla. Luego, me senté en una silla frente a ella.

-Si, cariño-me dio una sonrisa de lado mientras se acomoda en el sofá-gracias por todo, enserio.

-Preciosa, no tienes que agradecerme nada-me acerque a acariciar su mejilla-ya te lo mencione antes, siempre estaremos el uno para el otro, pase lo que pase.

Su sonrisa se ensancho mas antes de que diera un sorbo al te de manzanilla que he preparado.

Nuestro silencio fue acabado por un sonido que proviene de su celular, este se ha mantenido en su mochila desde que llego. _________ coloco la taza sobre la mesa de centro y se levantó del sofá para atender la llamada.

Leyó un momento la pantalla y luego contesto.

-Hola, abuela-murmuro.

Silencio.

-Un poco mejor.

Silencio.

-Con Justin-me miro. Le di una sonrisa que la hizo sonrojar.

Silencio.

-Si, tranquila. Estaré muy bien con el, no tienes de que preocuparte.

Silencio.

-De acuerdo. Buenas noches, descansa y también te amo.

Colgó la llamada y se acercó nuevamente al sofá dejando el celular sobre sus piernas y tomando nuevamente la taza de la mesa para beberla.

-¿Todo bien?-pregunte.

-Si, solo quería saber dónde me quedaría y como me encontraba.

-¿No menciono nada acerca de tu madre?

-No, tampoco quise preguntarle nada. Estoy muy dolida con mi madre por lo que dijo y el cómo actuó.

-No te preocupes, mi amor-dije-ya verás que con el paso de los días todo se va a tranquilizar y podrás conversar de buena manera con tu madre.

-Si, tienes razón-se encogió de hombros-¿por qué no vienes aquí a mi lado?, el sofá es bastante grande y cómodo como para que estés sentado en esa silla.

-No quería molestarte-conteste levantándome de la silla que menciono.

-Para nada. Yo soy feliz con que estés aquí a mi lado.

Hice caso a sus palabras, no tarde ningún minuto en estar sentado a su lado.

Nuevamente dejo la taza con el té sobre la mesita de noche junto a su celular, se dio media vuelta y sin pensarlo, me abrazo. Al instante correspondí su abrazo, levantándola entre mis brazos y acomodándola sobre mi regazo.

-Quizás te lo he repetido muchas veces-murmuro en mi oído, la escucho atento-pero no cabe decirte nuevamente gracias, cariño.

Sonreí con mi barbilla apoyada en su hombro.

-Eres el mejor del mundo y no hubiera sabido que hacer sin ti. Te juro que no me importa que problema se presente entre nosotros, nunca me voy a arrepentir de conocerte y decidir construir esta hermosa relación.

-Yo mucho menos, preciosa-dije-eres lo mas hermoso que me ha pasado en mi vida.

Ella se separó lentamente de mi, conecto nuestras miradas y sin dudarlo, unimos nuestros labios en un beso. Sus dedos agarraron con fuerza mi cabello, tirando de el hasta que un gruñido salió de mi garganta.

Nuestros labios no paran de tocarse una y otra vez, nuestras lenguas están jugueteando en un ritual de fuego, parece como si ambos compitiéramos por quien es mas rápido, profundo y placentero.

________ soltó un gemido y se separó unos segundos para tomar aire, notando mi cálida mano introducirse bajo su remera. No tardamos mas que unos instantes en volver a unir nuestras bocas.

Me levante del sofá con ella entre mis brazos, y con mucha dificultad camine hasta mi habitación, mas exactamente, en mi cama. En aquel lugar coloque su cuerpo delicadamente montándome sobre ella sin aplastarla.

Deslice mis cuerpos hacia su cuello, en donde beso y muerdo a la misma vez provocando gemidos de su parte, y me fascina oírla porque me provoca mas placer que estar besando y mordiendo su cuello.

________ tiene sus manos en cuello y yo tengo las mías bajo su remera, acariciando de arriba hacia abajo su espalda, la cual se arquea con cada beso que brindo por distintas zonas de su cuerpo.

Quiso tomar mando a nuestro momento, se posiciono arriba de mi cuerpo mirándome con sus ojos llenos de lujuria, la lujuria que se ha creado entre nosotros. Arrastro sus manos desde mi cuello hasta mi remera, quitándola en un par de segundos.

Y a continuación, la lanzo a un lado de la habitación y comenzó a besar mi torso con sensualidad. Yo sin quedarme atrás, masajeo su trasero con mis manos y gimo por los besos que me brinda. ________ no se imagina cuanto disfruto este momento, y no por el hecho de que ella este provocándome placer, sino porque siento como si fuera la primera vez que tendré relaciones sexuales.

-Eres tan perfecta, mi amor-dije luego de bastantes minutos estando en silencio.

-Tu no te quedas atrás. Eres completamente delicioso.

Unió nuevamente nuestros labios, hundiendo su lengua dentro de mi cavidad para encontrarla con mi lengua, su beso es exigente. Sus labios y lengua persuasivos, me acerca a su cuerpo y me aprieta con fuerza. Cada vez la estoy deseando mas con locura.

El beso de ________ sabe cálido y profundo, deseo estar en sus brazos y quererla por la eternidad. Estoy completamente seguro de quererla, y siento que ella esta lista para dar el siguiente paso.

Me despegue de sus labios y los lleve cada parte de su rostro, dejando suaves besos por allí, mientras comienzo a desabrochar el botón y cierre de su short.

-Te adoro tanto-le susurre en el oído-¿segura que estas lista?

-Lo estoy. Te quiero demasiado, Justin-respondió con total seguridad.

Ante aquella confesión, me apresure en bajar el short por sus piernas y retirar la remera de su cuerpo, dejándola en ropa interior. Se separo de mi y me miro con dulzura. Ahora esperare que ella termine de quitar las pocas prendas que quedan en mi.

Al instante entendió mi mirada, porque no tardo mucho tiempo en imitar la acción que ejercí con su short, y quitarme el pantalón de chándal de mi cuerpo. Quedando ambos en ropa interior frente al otro.

Pronto estábamos desnudos sobre mi cama, acariciándonos, sintiéndonos y besándonos como no lo habíamos hecho luego de todos los que nos hemos dado. Fui suave al entrar por precaución, _________ al instante me tranquilizo y me recordó que ella no es virgen, mucho menos yo.

-Por favor... ve mas fuerte-dijo ella acercándose a mi boca y tirando suavemente de mi labio inferior. Dando una corriente eléctrica por cada parte de mi cuerpo.

-Pídeme todo lo que quieras, mi amor-murmure.

Y ese fue el inicio de que comenzara a moverme con mayor rapidez en su interior, moviéndonos entre las sabanas, expresando todo el amor que sentimos y todo el que queda por darnos.  

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Hola niñas!

Quería hacerles una propuesta, si este capítulo llega a los 30 votos y 10 comentarios para esta noche... mañana hago una maraton😊

Son las 12:30 pm en Chile, a las 11 de la noche verificaré! Anímense!

Las amo mucho💘