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Voy bajando las escaleras de mi casa mientras entro a mi bandeja de mensajes para contestar el que Nathan me ha enviado hace menos de un minuto. Para mi sorpresa, vi a mi madre entrar a casa con su cartera en una mano y sus llaves en la otra.
-¿Mamá?-pregunte con mi ceño fruncido al bajar el último escalón-¿qué haces en casa tan temprano?
-Hola, hija-se acercó a mi para besar mi frente-el señor Bieber me ha concedido la tarde completa para mi. Por cierto, Nathan y Abby están esperándote.
-Lo se, vienen a buscarme para irnos a trabajar-ella asintió comprensiva-¿y porque te ha dado la tarde completa? ¿ocurrió algo?
-Nada malo, no te alarmes. Solo que esta noche tendré que viajar por unas reuniones de negocios de la empresa.
-¿Bromeas?-negó con una pequeña sonrisa-¿y hacia dónde?
-Paris, Francia. ¡Estoy tan emocionada!
-¡Dios!-chille emocionada también-¡que suerte tienes!
-Tal vez-se encogió de hombros-viajamos esta noche, cerca de las once. Y regreso pasado mañana a la misma hora.
-¿Y viajaran solo?
-No, por lo que el señor Bieber me comento es que viajamos junto a un par de socios y su esposa-asentí-prometo que te traeré muchos recuerdos y fotografías de allí, ¿de acuerdo?
-Esta bien, mamá. No tienes para que, solo enfócate en tu trabajo y en disfrutar tu pequeña estadía en esa hermosa ciudad.
-Gracias, hija. ¿Mi madre esta?-pregunto, refiriéndose a mi abuela Olivia, claro.
-Fue al supermercado, pero no tarda en regresar. Ahora debo irme para no hacer esperar mas a los chicos.
-Claro, hija. Lo entiendo perfectamente.
Me acerque a ella y la abrace muy fuerte.
-Te amo mucho, mamá. Que te vaya excelente en el viaje, no olvides disfrutarlo.
-A ti también que te vaya muy bien con el trabajo en la cafetería, prométeme que vas a cuidar muy bien de ti y de tu abuela.
-No tienes por qué pedírmelo-me aleje de ella, mirándola directamente a sus ojos-te ves tan feliz en tu trabajo que me tranquiliza verte así.
-El trabajo con el señor Bieber ha sido genial. Siento como si tu padre me lo enviara desde donde el esta.
No pude evitar sonreír melancólica al oírla hablar de mi papá, quien sabe si en estos momentos se encuentra observando nuestro bello momento.
Finalmente, abandoné mi casa luego de un par de segundos mas de despedirme con mi madre y rápidamente me dirigí al auto de Nathan, subiendo en la parte trasera y observando a mis amigos.
-Lamento la tardanza, chicos. Pero estaba despidiéndome de mi madre.
-¿Por qué despidiéndote?-pregunto Abby confundida.
-Viaja esta noche a Francia por su trabajo-sonreí levemente-y vuelve pasado mañana.
-Que buena noticia, eso significa que le ha ido bien en su trabajo-asentí conservando mi pequeña sonrisa-me alegro mucho por ustedes, pequeño saltamontes.
-Si, yo también-Abby se giro un momento para sonreírme.
-Gracias, chicos.
Y luego de mis palabras, Nathan dio inicio a nuestro trayecto hacia la cafetería, hoy solo trabajamos los tres. Samantha ha pedido el día libre por unos tramites personales que debe hacer, y Nick ya no trabaja ahí hace mucho tiempo. Y de quien, por supuesto que no se noticias desde la última vez que lo vi, un mes con exactitud.

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Amor Clandestino |j.b|
Hayran Kurgu"Eres totalmente inevitable, amor... casi como respirar"