Amor Clandestino |j.b|

48.

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Mi corazón late a una velocidad que no puedo controlar, las palabras de Justin suenan por todos los rincones de mi mente. Mi respiración esta agitándose y puedo sentir como si una mano rompiera mi alma en mil pedazos por dentro.

Sin poder evitarlo, un par de lágrimas comenzaron acumularse en mis mejillas; detesto ser tan sensible en algunas ocasiones. El me observa con un rostro totalmente tranquilo, estoy obligando a que mi mano no le dé un puñetazo en su cara por lo estúpido que es.

De pronto, una sonrisa de oreja a oreja comenzó aparecer en su rostro, mis lagrimas automáticamente se detuvieron; y esta vez, un rostro totalmente confundido se posó en mi cara.

-¿Qué te causa gracia?-hable luego de unos segundos, levantándome exaltada del sofá-¿acaso para ti es gracioso ver una mujer llorar por el amor de su vida?

Continúa observándome de la misma forma que hace unos segundos, la ira esta comenzando a correr por mis venas.

-¡Eres un imbécil!-comencé a gritar-¡no te das cuenta de que esta situación me duele! ¡si te vas juro que no lo soportare! 

Seque las pocas lagrimas que salieron de mis ojos, con brusquedad.

-Cariño... cariño...-se levantó rápidamente del sofá y se acercó a tomar mis manos con las suyas. Rápidamente las quite-cariño... era una broma.

Abrí mis ojos de par en par al oírlo.

-¿Qué?-fue lo único que salió de mi boca en ese momento.

-Lo lamento, cariño-sonrió atrayéndome hacia su torso-quería hacerte una pequeña broma para ver tu reacción. No pensé que podrías llorar o me trataras de esa forma.

-No puedo creerlo...-susurre incrédula-definitivamente te odio.

Una gran carcajada se emitió de sus labios.

-Aun así te amo, cariño-beso mi coronilla-y para que lo sepas, tu también eres el amor de mi vida.

Me aleje un momento para observarlo, debo alzar un poco mi mentón ya que el es mas alto que yo. Beso mis labios cortamente por unos largos segundos, y es inevitable no cerrar mis ojos al sentir su tacto.

-Por favor no vuelvas hacerme ese tipo de bromas, te juro que no soportaría verte lejos de mi. 

-Te prometo que nunca mas haré ese tipo de bromas-acaricio mis mejillas dándome un último beso en mis labios-y perdóname, jamás querría volverte a ver llorar por mi.

Asentí con una pequeña sonrisa.

-De todos modos, quiero conversar contigo de algo pensé. Quiero oír tu opinión; la venida a mi departamento no será en vano.

-Bien... ¿de que se trata?-pregunte confundida y a la vez intrigada.

-Ven, sentémonos.

Tomo mi mano y me jalo con el hacia el sofá nuevamente, colocándonos en la misma posición de hace un rato.

-Cariño...-Justin comenzó a suspirar, se perfectamente que eso lo hace cuando esta nervioso.

-Dime con tranquilidad, sabes que puedes decirme lo que sea-sonreí de lado.

-Bien, aquí voy-soltó un último suspiro-¿te gustaría que viviéramos juntos?

Mis ojos nuevamente se abrieron al oír sus palabras, pero acompañados de mis labios.

-¿Fue apresurado?-volvió a decir al notar mi expresión-lo lamento... no quería incomodarte. Es solo que ya los dos somos adultos, hemos convivido como pareja antes. Creí que sería una buena idea para darle un nuevo inicio a nuestra relación, también pensé que te agradaría.