Ruleta Rusa

Parte 34

Perdonen la demora pero ya e vuelto! Se vienen unos capítulos que mamita.. jiji. Espero que les gusten, comenten. Gracias por leer la historia.

Capitulo 34

El agua subía y subía. El pánico se apoderaba de todos. Deseaba tanto que todo esto fuera una pesadilla, pero no lo era.

Y ahí estaba luchando por mi vida al igual que las otras 25 personas, y una de esas 25 era Cairo.

No quería que mi vida terminara así, todavía me faltaba mucho por vivir, pensaba mientras el agua seguía subiendo. No había nada a que aferrarse, no había por donde escapar. 

Nunca imagine que nuestro final seria como el de Rose y Jack.

En segundos moriría ahogada, y lo único que pasaba por mi mente era la escena de Titanic, muy fuerte.Que por cierto, nuca vi la película, siempre que la pasaban en la tele llegaba para el final, cuando el Titanic ya se esta hundiendo. Todo este fuckin delirio antes de pasar a mejor vida, era culpa del maldito tequila.

-Belg.. Belgica!.- escuche que gritaba Cairo, voltee para ver nuestra ultima respiración antes de que el agua nos alcanzara por completo.

38 hs antes..

-Bienvenidos al hotel Quetzal, de la Riviera Maya, en que los puedo ayudar?.-decía una chica morena con un colorido vestido del otro lado del mostrador. 

-Hola soy Carlos Herrera hice una reserva a mi nombre, hace como 1 semana.-le decía este.

-Bien, déjenme verificarlo.- decía la chica mientras buscaba en la computadora.

**

Después que desempacamos fuimos a almorzar a un pequeño restaurante que se encontraba en la playa.

-A que no tiene un aire al chiringuito este lugar?.- decía mi madre mientras que esperábamos a que nos trajeran la comida.

-Chiringuito?.- preguntó Ren confundido.

-Si , al chiringuito de Pepe.- dijo mi madre como algo obvio.

-Es verdad, se parece.- le decía Carlos para luego darle un sorbo a su copa de vino. 

Luego que terminamos de almorzar, mama, Tomy y Carlos volvieron al hotel, puesto parece a Carlos le dolía de la cabeza.
Así que Ren, Santiago, Cairo y yo fuimos a recorrer el centro de la cuidad.El centro de la ciudad no eran mas que locales de artesanías y restaurantes, así que a la vuelta decimos venirnos caminado por la playa al hotel.

Los 4 caminábamos por esta, cuando pasó una chica rubia repartiendo folletos, le dio uno a Cairo junto con una guiñada y sigo caminando como si nada. 
Santiago intento arrebatarle dicho folleto, pero fue inútil. Cairo lo hizo un bollo y lo metió dentro del bolsillo de su bermuda. 

Extraño, pensé, igual digo a esta altura nada que hiciese Cairo era de sorprenderme.. 

-Che mañana quiero ir a una taberna bar, donde preparan uno de los mejores tequilas de Mexico, por no decir el mejor, quien se apunta?.- interrumpió Ren.